Camino del Norte - Etapa 5ª - Luarca - Mondoñedo - Desde Santander

Luarca - Mondoñedo

Enlace con el resto de etapas:
Camino de Santiago del Norte - Santander - Santiago de Compostela - Albergues y Alojamientos
Etapa 1ª - Santander - Queveda (Santillana del Mar)
Etapa 2ª - Santillana del Mar (Queveda) - Ribadesella (Camango)
Etapa 3ª - Ribadesella (Camango) - Avilés (Overo)
Etapa 4ª - Avilés (Overo) - Luarca
Etapa 6ª - Mondoñedo - Baamonde
Etapa 7ª - Baamonde - Sobrado dos Monxes
Etapa 8ª - Sobrado - Santiago de Compostela

O Reguengo - Senderos duros del final de la Etapa


Ribadeo desde el puente de la autovía


Básicamente
Una ruta muy fácil en su primera parte, justo hasta Ribadeo, unos 56 km, bordeando la costa Cantábrica, con una carretera para nosotros solos, con largas rectas y poco perfil.
Y dejando la costa en Ribadeo, entramos en el interior de la provincia de Lugo, cambia el perfil y ascendemos 1600 m acumulados. Cuatro subidas, de las cuales una más larga.
Pasaremos por Navia, Ribadeo, donde compraremos comida, y ya no hay nada casi hasta Lourenza y Mondoñedo. Es un territorio rural, muy poco poblado, pero donde encontraremos ayuda de agua en una casa privada y algo para comer en un lugar especial para peregrinos en Villamartin. Todo marcado con WP
Al final Lourenza y Mondoñedo, interesantes ambas dos.
Resumiendo, primera parte costera y tranquila, y segunda parte solitaria, de reflexión y disfrute de la Galicia interior.

Km 164 a Santiago - Antes de la Bajada a Lourenza


Dificultad
Mi compañera de viaje no tuvo su día, primero no terminaba de marchar, tuvimos que parar a tomar algo en un bar de carretera, el Álamo, entre Rapalcuarto y la Calostra, km 43.100, por cierto muy bien lo que comimos. Parece que se recuperó.
Hicimos bien la entrada en el interior de Galicia, subió con fuerza las rampas más duras y las cuestas largas, hasta llegar a Mondoñedo, y allí no poder dar una pedalada, ni en llano.

Adios Cantábrico - Antes de Ribadeo


Tuvimos que llegar a la plaza de Mondoñedo y comprar una empanada para que se recuperara. Al rato ya marchaba hacia la casa Bracamonte, en lo más alto de Mondoñedo.

Resumiendo, casi 100 km que pasan factura al final.
De hecho teníamos pensado llegar al día siguiente a Sobrado y decidimos cortar hasta Baamonde, e hicimos bien, disfrutamos muchísimo mas de los sitios , paisanos y paisajes, pero fue al día siguiente.

Aldea antes de Mondoñedo, creo que San Paio


Alojamiento y hostelería
Dormimos en Pensión Oria, espacial para peregrinos, precios razonables, pero muy justito en instalaciones. Sobre todo si tienes que subir a un tercero sin ascensor con todo el equipaje.
Desayunamos enfrente muy bien atendidos.
Paramos a tomar algo en El Álamo, pasado Casariego. Muy bien.
Compramos para hacer bocadillo en el autoservicio Gadis en Ribadeo.
Comimos en el camino en O Vilar, sentados en la hierba. Que lujo.
En Vilamartin Grande repusimos fuerzas para continuar. Hay una tienda-bar para peregrinos muy bien atendido, te informan de alojamientos nuevos en el Camino.
Y cenamos en Mondoñedo, hay varios locales en la plaza, pero no hay más en el resto del pueblo.

Nos alojamos en la casa de Bracamonte, muy buen sitio, Casi todo para nosotros. Muy buenas instalaciones y muy amplias.
Lo ideal, por precio, es el Albergue Montero, pero no había sitio en esas fechas.

Descanso merecido en Vilamartin Grande


La Ruta
Salimos de Luarca con una suave cuesta, que nos conduce a una altura que no vamos a dejar durante km. Al no pasar por poblaciones es un poco aburrido, yo cambiaría el recorrido entrando en algunas poblaciones para hacerlo más ameno, pero retrasaría la llegada a destino, a veces hay que elegir. Pero por lo menos entrar en Tapia de Casariego, se me paso.
Pasamos por Navia y su puente sobre la ría. Bonita villa asturiana.
Desde allí inexorablemente hasta el puente del Eo.

El paso por el puente de la Autovía por la Ría del Eo
Vaya historia, intente pasarlo por la derecha y me asuste, pensé que era más fácil por la izquierda y vi que era igual de ancho el pasadizo que nos dejan a los peatones.
Yo con un manillar de 74 cm lo veía muy justo para ir montado, con una valla hacia la Ría muy justa de altura, me entro pánico y me baje, Raquel quería ir montada y no la deje, me puse delante para que se bajara.
Para cruzarme con un peatón fue difícil, en fin que se han pasado con la estrechez, hay sitio para darle unos centímetros más.
Qué largo se hace a pie. El viento y las vibraciones de los camiones que pasan hacen que desees acabar ya.

Puente de la Autovía - Paso estrecho en la pasarela lateral, preferí pasarlo andando


Estamos en Ribadeo, las señales del camino te despistan, seguir el track.
Lo cruzamos, paramos a comprar comida y seguimos. Salimos en dirección a nuestra nueva aventura interior, dejamos el Cantábrico.

Entramos en la paz absoluta, tu contigo mismo, menos mal que voy acompañado.
Es la hora de comer, una pradera verde al lado de la sombra de un árbol, hay algo mejor?
Un buen bocata y un refresco acompañan nuestra charla y descanso. Queda lo más duro y hay que mentalizarse.

Empiezan las cuestas, nos quedamos sin líquido, pero afortunadamente un paisano en Vilamariz nos da agua de su fuente, y charla para relajar. Es una zona dura.

Cuestas arriba, cuestas abajo, cambios de valles. Collados, bosques, aldeas, en fin que paz.
De Vilamartin pequeño al Grande una buena bajada y una cuesta durísima hasta el collado. Allí nos espera la tienda del peregrino, un descanso, una charla y reponemos fuerzas, esto no acaba.

Bajada rápida, que pasamos Gondan sin darnos cuenta, pero nos queda la subida al monte Calvario, antes de poder bajar hasta Lourenza y su impresionante iglesia. Descanso, fotos. Parece que Mondoñedo esta ahí, pero no era así, si vas por el camino original te espera un rompepiernas continuo, bello sendero continuado por la falda del monte atravesando aldeas solitarias.

Cerca de Gondan


Una larga bajada nos leva a Lourenza, Villa historica con un monasterio desamortizado, pero con su iglesia pujante todavía.
Descanso en su plaza y refresco de su fuente. Buscamos seguir el camino, es dificil, sale por un callejon estrecho.

Bajada final a Lourenza


Al final Mondoñedo, y Raquel no puede dar una pedalada más, se ha vaciado, no me extraña.
Hay que parar, Mondoñedo es una cuesta larga, larga, hasta el centro de la villa.

Al final llegamos a la plaza de la Catedral, impresionante edificio. Allí hay una tienda de todo, una empanada urgente y a comer.

Mondoñedo


Es la hora de las coincidencias, de repente aparecen los chicos el primer día, los de Almería, que sorpresa, estuvimos un buen rato de charla. Llevaban la misma ruta descargada que nosotros.

Decidimos cortar la siguiente ruta después de las dos pájaras de hoy. Hicimos bien, pero tuve que cambiar los alojamientos que nos quedaban de día y no tuve problemas afortunadamente. Eso sí, tuve que buscar en Baamonde, y no quedaba mucho para elegir, pero eso toca en la otra ruta.