Cañadas reales y caminos antiguos que unían pueblos cercanos a Jaén I.

Hoy me he propuesto una ruta diferente que enlace pueblos a través de cordeles históricos creados para comunicarlos entre sí.
De paso me he encontrado con asentamientos humanos históricos destinados principalmente a la agricultura que datan incluso del siglo XII o XIII. Promontorios construidos para la defensa de sus gentes y donde guardaban el ganado y sus aperos de labranza, así como los restos de cosechas que difieren de la tradicional recolección de las aceitunas, pues gran parte del territorio se dedica aún al cultivo de cereales de secano.
También se conservan todavía restos de empedrado destinado a la separación del trigo de la paja (aventar) que desde la altura de estos lugares aseguraba el movimiento del viento.

Desde la antigüedad más remota, el ser humano ha tenido necesidad de moverse de unas localidades a otras para poner en práctica el comercio o simplemente para desplazarse por diferentes razones. Por eso existían las "Cañadas Reales", creadas en un principio para la transhumancia y reguladas por Alfonso X el Sabio desde 1273. A pesar de que la norma les obligaba a tener una medida de anchura de 90 varas (aproximadamente unos 72 metros), es evidente que en la actualidad ninguna alcanza esa medida.

Volviendo a la ruta, hoy salgo de la Vía Verde del Aceite hasta el km 2 y pico, para girar a la derecha tomando el primer camino antiguo del día, el camino de Arjona a Jaén. Lo transito pocos km pues mi intención es girar a la derecha para coger el "Camino de Torredelcampo a Mengibar" durante unos km y que me llevaría hasta Villar de Cuevas, pero hoy no tengo esos planes. Pasado el Centro de Control de Residuos Sólidos, me dirijo a la izquierda por el conocido "Camino de los Palos" hasta el cruce del "Camino de Fuerte del Rey a Grañena". Antes tengo un pequeño vadeo sobre al "Arroyo del Judío" que hoy llevaba agua aunque poca para poder pasarlo, si bien lo normal aquí es que este arroyo no lleve agua.

Tras llegar al cruce mencionado de Fuerte del Rey y siguiendo recto, hay una indicación en el camino que pone "prohibido el paso" "propiedad privada", pero más bien parece una colocación realizada sin autorización de Medio Ambiente porque se trata de un camino de tierra que no solamente llega al cortijo de Marrache, sino que continúa hacia otras muchas fincas o parcelas de olivar y secano. En mi caso y siguiendo el mapa, decidí continuar ignorando esta indicación sin que nada ni nadie me indicara lo contrario.

Tras rutear por zonas entre olivares y plantaciones de cereales, llego al "Camino entre Torredelcampo y Mengibar" y casi sin esperarlo a Fuentetéjar, (hay quien la nombra Fuentetétar), que es una cortijada con una fortaleza en ruinas del mismo nombre. En realidad es un castillo rural del siglo XII y XIII visualmente conectado con el Castillo de Jaén y perteneciente también al mismo término municipal. Es una lástima que el abandono y la dejadez hayan dejado esta joya de nuestra historia en un recuerdo para nuestras generaciones futuras.

Desde ahí bajo unos cuentos metros del altura y tras pasar el arroyo Salado sin agua -por cierto-, subo una empinada cuesta para llegar a Ventosilla, que es una aldea que pertenece a Jaén y está situada a escasos 16 km. Según el último censo viven actualmente 3 personas. La primera cita documental que se tiene de este asentamiento data de 1378 Tiene varias naves destinadas a guardar aperos y viviendas. Las vistas desde aquí y desde Fuentetéjar son espectaculares.

Sigo acortando para alcanzar la JV-2305 y desde allí decido girar a la derecha para irme acercando a Fuerte Del Rey, pero antes paso por otra cortijada en ruinas llamada "Cortijo de Montalbán" y muy próximo a éste, el "Cortijo de Jubera". Llego a un cruce que tomo a la izquierda coincidiendo con la "Cañada de Cazalilla a Jaén" que transito durante algunos km hasta el cruce del camino de Fuerte del Rey a Mengibar que tomo a mi derecha. Desde ahí ya solo queda bajar hasta Fuerte del Rey y cruzarlo con la intención de subir hasta el collado del "Camino de Torredelcampo" acercándome a Jaén.

Una ruta diferente cuyo objetivo es recorrer antiguos itinerarios que la modernidad ha ido dejando en el olvido, pero que nuestros antepasados han transitado con medios de transporte mucho más precarios de los que disponemos hoy en día.