Caspe/Alcañiz: m. derecha río Guadalope-Estanca-Cabezo Negro-falda Vizcuerno

Ruta con buen kilometraje y desnivel, como preparación para Monegros, HU-108 o lo que tengamos en el horizonte. En algunos tramos, chulísima!!
Hasta la Presa de Caspe va subiendo con moderación. Una vez pasamos el aliviadero comienzan los tramos pastosos, con unos cuantos repechos y bajadas, todo engravado, que van cargando. Lo compensa la visión del río Guadalope, que merece mucho la pena.
Una vez dejamos el cruce de Valcomuna y rodamos hacia Alcañiz, hay unos kilómetros moderados hasta llegar a Valdefardachos, primer "puerto" del recorrido, con rampas del 12/13%. Arriba, impresionantes vistas.
Tras la bajada, la principal subida de la ruta, la que nos lleva a la Cantera. Es relativamente tendida pero más que suficiente.
Llaneamos, bajada hacia la Val de Zafán, y por el tercer túnel y demás llegamos a Alcañiz.
Seguimos la vía verde que dejamos para hacer una visita a la Estanca. Muy maja esa parte de la ruta.
Llegada a Puigmoreno, reponemos fuerzas (nos habíamos citado con un buen número de compañeros del Club Ciclista Caspolino) y continuamos.
El próximo objetivo es el Cabezo Negro, al que subimos por pista, primero asfaltada y luego engravada. La subida es suave. Lo que sorprende es cómo el terreno se va pintando de tono rojizo, y lo inhóspito del paraje.
Bajada que haremos con precaución (terreno en estado perfecto para ciclar, pero con atención), llegaremos al camino del Cerrojo.
Lo dejaremos para subir hacia el vertedero de Alcañiz, si bien antes de coronar, hacemos un giro de 180º para bajar hacia la zona del Mas de Molina, con un sube y baja entretenido con el que llegaremos al término de Caspe. Por una pista nueva empalmamos con el camino que nos lleva a la Balsa del Chopo. De allí a Zaforas, y por el túnel que pasa bajo la N-232, vamos subiendo por Val del Pino hacia la falda de Vizcuerno, para bajar por la Val de la Liana, los Picos y la Rigüela.
Ya estamos en casa.