Copa BTT 2015. Desafío Albacete. Primera etapa.

Crónica de mi primera participación en una competición de BTT. A mis 41 añitos, nunca es tarde si la dicha es buena.
Se trata de la Copa BTT desafío Albacete disputada el pasado fin de semana del 27 y 28 de Junio en plena ola de calor, por lo que a los 140 km y más de 2.400 metros de desnivel positivo de las dos etapas había que sumar temperaturas cercanas a los 40 grados.
Más de un mes estuve preparando la prueba, con mucha incertidumbre sobre todos los aspectos organizativos y sobre cómo se comporta el resto de participantes. Inquietud por si estaría a la altura, por si molestaría o me molestarían en las sendas, por el ambiente entre los participantes… Todo lo que un novato suele tener en la cabeza.
A lo largo del mes me vi preparado para afrontar el desafío, con la simple idea de terminarlo haciendo una buena participación, es decir:
Entregarme sin fundirme, no ir por encima de mis posibilidades en las sendas, no pecar de timorato, no estorbar, y disfrutar, sobre todo disfrutar de la competición.
En la línea de salida del sábado, es decir de esta etapa que aquí vemos, tenía una buena sensación de calma y de tranquilidad. Los deberes hechos y la suerte echada, solo queda disfrutar. Salida lanzada y poco a poco buscando mi lugar, me adelantan, adelanto y trago polvo del camino…pero mucho. Parón en la primera senda, típico atasco que me decía que quizás salí muy atrás y algo conservador. Salimos a Bolinches y subida tranquila adelantando a algunos participantes para entrar bien en la senda, pese a todo vamos un poco frenados en esta senda y salimos al río para afrontar la subida de la cuesta de la bola, donde mis compañeros y amigos Luis y José acompañadas de sus chicas me animan, me dan un gel y sobre todo un subidón de moral.
Bajada por camino roto y entrada en senda con un rampón de subida que hacemos todos a pié y después zona de sendas y caminos enlazados…rompe piernas. Bajada rápida por pista y dura subida por senda donde también tenemos parón por el intenso esfuerzo de esta subida. Primer avituallamiento donde me tomo varios vasos de agua como si no hubiera mañana y veo las caras desencajadas de otros corredores tras el esfuerzo. Sin duda fiel reflejo de la mía.
Un poco de camino y senda estrecha con final en bajada técnica con escalones. Nos deja en el camino que sigue el río. A la altura de Maldonado lo dejamos y subimos a la planicie por pista con el sol pegando fuerte. Un poco de llaneo y sendas con terreno suelto y roto sin complicación, pero con cuidado. Mis compañeros de ruta son más o menos los mismo desde hace un rato y en zonas de llaneo nos agrupamos un poco, vamos comentando algún paso, incluso tenemos palabras de ánimo, alguno se escapa en las subidas, otro se queda en las bajadas, pero más o menos ya estoy en mi lugar, y el ambiente y el compañerismo me hace ir con una sonrisa en la boca.
Bajada por la senda del ganado hacia Jorquera. Senda con mucha piedra suelta en la que me da una contractura en la espalda de ir demasiado tenso agarrado al manillar con fuerza para ir pasando sobre las piedras. Por fortuna desaparece al llegar abajo y puedo seguir sin problemas. Zona de sendas para cruzar el arroyo de Abengibre y después llaneo rápido por pista. Aquí de nuevo mis colegas y sus chicas me animan y me tiran fotos. Subidón de adrenalina de nuevo.
Se me escapa mi grupete y me quedo solo llaneando en este tramo largo y cansado en el que uno no termina nunca de ver el castillo de Alcalá.
Paso a algún descolgado y me pasan, pero en general sigo en mi sitio.
Llegada a Alcalá donde me despisto en la salida del puente y por no tocar al corredor que me precedía me paso frenando y me voy al suelo con un fuerte estacazo que me deja mareado pero sin mayores consecuencias. Se sale la cadena, la meto y continúo con la cara de corcho. Por suerte llego al avituallamiento y me recupero a todos los niveles. Sigo para subir la senda de Casas del Cerro que se me atraganta mucho más de lo que esperaba, pero aún así incluso paso a más corredores y alguno me pasa, como no.
Senda por la cornisa y algo de camino, más sendas donde me encuentro con Juan, un corredor con el que después de los dos días entable cierta amistad pues íbamos en la primera etapa sufriendo las últimas sendas a la par y me decía que lo pasara y yo le decía que estaba estupendo tras él, sacando el pié cuando él iba indicando.
Así pasamos estas sendas en la cornisa y la senda de La Gila. Muy técnica y con piedra suelta desde el principio, por lo que sin duda había que hacerla con cuidado. Por suerte Juan iba con tranquilidad y mesura y el grupo que me perseguía también, por lo que la bajamos con cabeza y sin agobios.
Abajo nos quedaban unos 8 km de llaneo por pista para llegar a la meta con una gran sonrisa, cansado pero con la sensación de haber hecho una buena competición, guardando un poco para la segunda etapa y disfrutando del ambiente.
La certeza de que estas logrando superar el desafío impuesto, es una magnífica sensación de orgullo y satisfacción. Os la recomiendo a todos.
Tiempo 4 horas 2 minutos y posición 225 de 419 inscritos.
Eso tras 70 km de etapa con 1.100 metros de desnivel positivo y 40 grados al sol.
Perfecto¡¡