De Hortigüela al Pico Mencilla, bajada a Pineda de la Sierra y vuelta a Hortigüela.

Salgo de Hotigüela por pistas, en una calurosa mañana de julio, dirección a Jaramillo Quemado. Aquí podemos repostar agua fresca, en una estupenda fuente, que se encuentra en el mismo paso de ruta, la veremos al pasar situada a la derecha. Hay que coger todo el agua posible, ya que no encontraremos otro manantial hasta la bajada de Pineda. Subiendo al pico San Cristobal, encontraremos pequeños arroyos de aguas cristalinas, donde los no escrupulosos podrán también repostar.
Una vez pasado este pueblo se acaba la civilización, hasta llegar a Pineda de la Sierra. Durante 35 kilómetros ya no pasaremos por ningún lugar habitado.
El camino desde Jaramillo Quemado se hace entre robles rebollos, que nos irán dando sombra hasta llegar a las laderas de pinos y hayas, en los lugares más altos. Hasta llegar al pico San Cristobal tendremos sombra en un 80% del recorrido, cosa que se agradece por las altas temperaturas de julio.
Los últimos tramos para subir al Pico San Cristobal, se hacen por un cortafuegos, que en algunos lugares se hace muy vertical y muy rotos, difícil subirlos montado en la bici.
Una vez arriba y después de sufrir en la subida, las vistas son fabulosas. Seguiremos por toda la línea de cumbres, por una camino fácil, hasta llegar al pico Mencilla, la cumbre más alta con sus 1932 metros.
Desde el Pico Mencilla podemos ver unas estupendas vistas de la Sierra de la Demanda, Picos de Urbión, pantanos, Sierra de Neila, otros picos del Sistema Ibérico, Pineda de la Sierra, por la cara norte y este. Por la cara sur, tierras de Lara con sus pueblos olvidados, Sierra de las Mamblas y los cortados del Valle de Arlanza. En los días claros, también se divisa la Sierra de Guadarrama.
Después de sufrir en la subida, llega una bajada trepidante hacia Pineda de la Sierra, por caminos y sendas poco marcados. Hay que llevar buenos frenos, ya que los desniveles creo que pueden alcanzar hasta el 30%. Literalmente hay que tirarse por la ladera de la montaña, durante unos 4 kilómetros, hasta llegar a una fuente de agua fresca. Desde aquí el camino que lleva al pueblo se hace más llevadero.
En Pineda podemos parar a comer en alguno de sus restaurantes, descansar y reponer fuerzas para el regreso.
Debido al fuerte calor, 37 grados, opto por tomar la vía del tren minero hasta Riocabado de la Sierra, no esté el día para volver atravesando la sierra. Desde este pueblo y por carreteras comarcales con poco tráfico, vuelvo a Hortigüela.
Ya llegando, el calor se hace insoportable, pero he conseguido el reto, hacer el Pico Mencilla en solitario.