De San bartolomé a la Peña

DESCRIPCIÓN DE LA RUTA Y CRÓNICA
En principio pretendíamos hacer una ruta ya repetida, siguiendo un track de Los Tropezones.
Con algo de desánimo porque me parecía poco atractiva la ruta en sí, pensando que sería más bien llana y por zonas deforestadas, inicio los preparativos habituales y me dirijo al punto de encuentro, donde aparecen todos puntuales menos Michel, que llega puntual a su hora.
Repartimos coches y bicis y para San Bartolomé que vamos los Agonías José Luis, Jesús, Michel, Fran y Dani, y yo de incrustado Tropezónico.
Todo empieza según lo previsto, con algo de fresco y buen ritmo por tanto. Cruzamos la Rivera de Meca por una pasarela (ver primera foto abajo) y al llegar a la vía abandonada del tren a Tharsis Jesús dice que vamos a investigar por la vía, que en 500 metros atajamos 2 kilómetros. Dudas, pero vale, le seguimos. En seguida aparece una especie de cortafuegos, que toma forma de pista, a un lado de la vía. Nos apuntamos, y con el eco de los tiros de fondo avanzamos por unos toboganes entretenidos entre vegetación mediterránea (segunda sorpresa para mí, tras la agradable Rivera de Meca).
Tras 1 km junto a la vía, esta hace una curva que yo ya había visto en el GPS y adiós muy buenas. Esto no fue una sorpresa porque mirando la pantalla ya había visto que Jesús andaba un poco liado con las distancias (o lo hacía a propósito para animar); en realidad, por la vía hubieran sido 3,8 km de traviesas, en lugar de los 6,1 km por pista que sí que hicimos a la vuelta.
En fin, que nos olvidamos de la vía y encontramos un paso transitado de la Rivera de Agustín (también bastante agradable, ver segunda foto, y pisada por bicis). Tirando de plano del GPS vemos una pista cercana y allí que vamos, aunque apreciamos que todas las pistas de la zona luego derivan hacia el Oeste, al encontrarse con la Rivera de la Dehesa Boyal. Seguimos la pista principal, hacia la carretera de San Bartolomé a Alosno, pensando tomar un desvío poco antes de esta hacia el denominado Camino de Ayamonte, que cruza la Rivera de la Dehesa Boyal no muy lejos de la carretera para llevarnos hasta Alosno. Encontramos alguna valla que nos hace dar algún rodeo a la altura del Puente de Garganta Fría, pero seguimos sin problemas con buenas vistas del valle de la Rivera de la Dehesa y sierras cercanas, hasta que llegamos al desvío que queríamos tomar y este no aparece. Decidimos seguir hasta la carretera y buscar el siguiente desvío hacia el Camino de Ayamonte (unos 200 m), pero está vallado, por lo que tenemos que seguir por la carretera, en fila y a buen ritmo.
Atravesamos Alosno sin parpadear, y tomamos el Camino viejo de la Puebla a Alosno, en una zona que sí cumple más mis expectativas iniciales que lo transitado hasta ahora, con zonas de explotación de eucaliptos y algún parque eólico, aunque no se hacía pesado el camino, especialmente cuando se empieza a vislumbrar al fondo la Peña, claramente destacando en el llano con sus paredes S-SE de roca. Rodeamos la Peña para evitar subir por carretera y hacerlo por el muy mentado “empedrado”, que efectivamente hace justicia a todo lo que ha dado de hablar en los últimos kilómetros; 850 m, 102 m de desnivel, 12% de pendiente media por un camino tipo romano. Durillo y entretenido. Además, la subida en realidad empieza antes con 500 metros más de subida para salvar 35 m de altura (7%), por pista.
Buenas vistas desde la Peña, comer algo y tomar agua en la fuente de la ermita, que nos vamos de vuelta directamente, no sin antes gastar alguna broma al que se dejó la bici arriba para ir a la fuente (que estaba de camino) o devolverle el favor al bromista en forma de agua fresca por el cogote.
Bajada de la Peña por carretera, vamos avisados del desnivel, la velocidad y una cadena peligrosa, que al final está quitada. Pasado el trámite me relajo, bajo charlando tranquilamente, me despisto, desvío por la pista de la derecha, Michel se para, le veo tarde, freno, imposible, suelto y tiro por donde puedo, le paso rozando viendo ya las estrellas acercase a mí, al final ni por la carretera ni por la pista, por en medio, freno como puedo en una zona medio llana junto a la pista y no pasa nada. Vaya unos segundos más largos, con lo tranquilo que estaba …
Seguimos pisteando, ahora por un paisaje más agradable de monte bajo y cerros bajos cubiertos de jaras, vadeando algún arroyo, hasta llegar a Tharsis. José Luis me invita a acercarnos a una de las cortas de muy interesante vista, pero la hora se echa encima, y los kilómetros ya hace rato que los llevo soportando, …, y lo que queda, así que doy la callada por respuesta, que tampoco se trata de desvelar las miserias de uno.
Por el pueblo ni pasamos, tramo breve de carretera y desvío por la izquierda, de nuevo por una zona que sin ser tampoco espectacular, es por lo menos agradable, para llegar rápidamente a Alosno, pero por el otro extremo que en la primera pasada del pueblo, tras una corta y dura subida.
Salimos del pueblo por una buena pista, nombrada como carretera (es la que va hacia el Cobujón). Vadeamos de nuevo la Rivera de Agustín, que a estas alturas nos recuerda lo cerca que estamos de las Minas de Tharsis con su color rojo Marte (por supuesto, de parar a hacer foto a estas alturas ni hablar) y entramos en una zona de dehesas abiertas muy agradable justo al empezar el tramo que Jesús quiso evitar al principio explorando la vía. Cortijo de la Estación, pista junto a la vía, Cortijo Los Millares, más dehesas y finalmente llegamos a la vía junto a la Casa de la Nava, punto donde nos desviamos por la mañana para explorar junto a la vía.
Desde el puente sobre la Rivera de Meca hasta San Bartolomé, afrontamos de nuevo el mismo terreno rompe-piernas de la mañana, pero ahora en sentido inverso y con 66 km más en las piernas. Y siempre en estos casos, los que habían aguantado agrupados contigo toda la ruta llega un momento en que deciden que mejor ir más rápido. Aguando como puedo, sabiendo que me voy a desinflar, unos 3 km más. Suelto al grupo de cabeza y me apunto a mi ritmo para llegar bastante tocado pero sin pájara aún. Estos 6 km son sólo 180 m de desnivel acumulado de subida, pero a mí me pareció mucho más.
A cargar los coches, cerveza rápida y para casa, que ya era tarde.

Ojo, aparte de los 71,5 km de la ruta, desnivel acumulado de subida de 1.521 m.