El Boquetillo
near Baza, Andalucía (España)
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Trail photos
Itinerary description
Por fin subimos a la aldea de los Rodeos en época de lluvias y hemos podido visitar esta la mayor cascada de la zona. Se trata de una ruta larga pero muy ciclable, mayormente por pistas en buen estado. Copio y pego la descripción de quién parte la idea de la ruta, Diego Salas:
Semana a través de la Rambla del Río Galopón, en perfecto estado para rodar. Antes de llegar a las Molineras tomamos desvío para ir por asfalto, hoy el agua baja por el cauce, también las aguas recientes han dejado en muy mal estado este tramo de la rambla. Pasamos Las Molineras, continuamos por el camino de la Semana. La acequia del arroyo Morax nos acompaña con su potente caudal. En el Cortijo del Martes, las bañeras, como bien la denominamos, por las bañeras usadas como abrevaderos para el ganado. A nuestra izquierda nos dejamos caer hasta el arroyo Morax, hoy con un caudal bastante considerable. Ascendemos para dejarnos caer al cauce del Arroyo Uclías, hoy también con agua corriendo. Hoy estamos disfrutando de unos parajes sin igual, todo está rebosante de belleza. El verde nos abraza en un ambiente mágico. El agua y la espesa vegetación nos abren el camino. Tras unos pocos kilómetros sobre el cauce del arroyo, tomamos a nuestra izquierda un camino que asciende muy seriamente. Vamos dibujando la ladera del valle, allí se va quedando el lecho del arroyo, al otro lado de la ladera, el cortijo Farraut, la presa del arroyo Uclías, hoy llena a rebosar. La cuesta, interminable nos va adentrando en otro valle. Llegamos a la pista principal, en el cruce de Rejano. Seguimos a nuestra derecha. Hoy el camino está aún peor que otros día, los camiones portadores de madera han dejado verdaderas zanjas y hoyos. Pasamos el cruce de Los Frailes, el de Retamar, también el primer cruce para el Tesorero. Ahora sí, encontramos a nuestra izquierda el letrero de Los Rodeos. Ahora nos queda un largo y magistral descenso hasta las aldeas: Los Tranquilos, Los Rodeos. Un precioso valle verde nos acoge, nos agradece su visita presentando su menor estampa.
Llegamos al núcleo de la población, aún con población activa. Un caño de agua, unos sencillos instrumentos de recreo para los más jóvenes. A nuestra llegada, una encantadora pareja, ya adultos, nos recomiendan como llegar mejor a la famosa cascada. «—Por la calle central se deja caer a una pequeña rambla que os lleva hasta el río, después solo seguir su cauce a través del prado—».
Cierto, a unos trescientos metros de la aldea está la cascada. Eso sí, para ver el agua caer, hay que ascender un montículo y descender hasta el arroyo. Hay que dejar las bicis al amparo de las choperas.
Merece la pena verlo. Si el arroyo no porta agua, no os molestéis en hacerlo.
Ahora nos toca volver. Hemos elegido hacerla circular, así que volvemos a la aldea de los Rodeos, nos dejamos caer al cauce del arroyo, en menos de 20 metros encontramos a nuestra derecha un sendero que nos lleva a cruzar el arroyo para tomar un camino ascendente, junto a un gran álamo. La dureza del ascenso es bastante seria, dos kilómetros de subida nos hacen sentir la dureza del camino que nos lleva a la pista; Cordel Gergal - Baza. Un camino que limita las provincias de Almería y Granada, al igual que las Sierras de Baza y Los Filabres. Camino que nos llevaría a Alcontar. Un descenso largo y gratificante, excepto salvar un pequeño valle. Llegamos al desvío con Alcontar, seguimos a nuestra izquierda junto al barranco de la Mojonera, buscando la rambla de Cañarete que tomamos a nuestra izquierda. Llegamos a la Rambla de Balax, hoy con agua por estos lares. A nuestra izquierda cruzamos el asfalto y pasamos junto a la ermita y colegio de Balax, llenamos los bidones de agua en la fuente, por si acaso. Volvemos a llevar un ligero descenso tras un dolido repecho. Otra vez la pista hasta el polígono de Caniles. Hacemos un pequeño recorte, un atajo nos deja en la rambla del Galopón de nuevo y desde ahí a Baza por la Vía Verde. Un placer.
Semana a través de la Rambla del Río Galopón, en perfecto estado para rodar. Antes de llegar a las Molineras tomamos desvío para ir por asfalto, hoy el agua baja por el cauce, también las aguas recientes han dejado en muy mal estado este tramo de la rambla. Pasamos Las Molineras, continuamos por el camino de la Semana. La acequia del arroyo Morax nos acompaña con su potente caudal. En el Cortijo del Martes, las bañeras, como bien la denominamos, por las bañeras usadas como abrevaderos para el ganado. A nuestra izquierda nos dejamos caer hasta el arroyo Morax, hoy con un caudal bastante considerable. Ascendemos para dejarnos caer al cauce del Arroyo Uclías, hoy también con agua corriendo. Hoy estamos disfrutando de unos parajes sin igual, todo está rebosante de belleza. El verde nos abraza en un ambiente mágico. El agua y la espesa vegetación nos abren el camino. Tras unos pocos kilómetros sobre el cauce del arroyo, tomamos a nuestra izquierda un camino que asciende muy seriamente. Vamos dibujando la ladera del valle, allí se va quedando el lecho del arroyo, al otro lado de la ladera, el cortijo Farraut, la presa del arroyo Uclías, hoy llena a rebosar. La cuesta, interminable nos va adentrando en otro valle. Llegamos a la pista principal, en el cruce de Rejano. Seguimos a nuestra derecha. Hoy el camino está aún peor que otros día, los camiones portadores de madera han dejado verdaderas zanjas y hoyos. Pasamos el cruce de Los Frailes, el de Retamar, también el primer cruce para el Tesorero. Ahora sí, encontramos a nuestra izquierda el letrero de Los Rodeos. Ahora nos queda un largo y magistral descenso hasta las aldeas: Los Tranquilos, Los Rodeos. Un precioso valle verde nos acoge, nos agradece su visita presentando su menor estampa.
Llegamos al núcleo de la población, aún con población activa. Un caño de agua, unos sencillos instrumentos de recreo para los más jóvenes. A nuestra llegada, una encantadora pareja, ya adultos, nos recomiendan como llegar mejor a la famosa cascada. «—Por la calle central se deja caer a una pequeña rambla que os lleva hasta el río, después solo seguir su cauce a través del prado—».
Cierto, a unos trescientos metros de la aldea está la cascada. Eso sí, para ver el agua caer, hay que ascender un montículo y descender hasta el arroyo. Hay que dejar las bicis al amparo de las choperas.
Merece la pena verlo. Si el arroyo no porta agua, no os molestéis en hacerlo.
Ahora nos toca volver. Hemos elegido hacerla circular, así que volvemos a la aldea de los Rodeos, nos dejamos caer al cauce del arroyo, en menos de 20 metros encontramos a nuestra derecha un sendero que nos lleva a cruzar el arroyo para tomar un camino ascendente, junto a un gran álamo. La dureza del ascenso es bastante seria, dos kilómetros de subida nos hacen sentir la dureza del camino que nos lleva a la pista; Cordel Gergal - Baza. Un camino que limita las provincias de Almería y Granada, al igual que las Sierras de Baza y Los Filabres. Camino que nos llevaría a Alcontar. Un descenso largo y gratificante, excepto salvar un pequeño valle. Llegamos al desvío con Alcontar, seguimos a nuestra izquierda junto al barranco de la Mojonera, buscando la rambla de Cañarete que tomamos a nuestra izquierda. Llegamos a la Rambla de Balax, hoy con agua por estos lares. A nuestra izquierda cruzamos el asfalto y pasamos junto a la ermita y colegio de Balax, llenamos los bidones de agua en la fuente, por si acaso. Volvemos a llevar un ligero descenso tras un dolido repecho. Otra vez la pista hasta el polígono de Caniles. Hacemos un pequeño recorte, un atajo nos deja en la rambla del Galopón de nuevo y desde ahí a Baza por la Vía Verde. Un placer.
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Easy to follow
Scenery
Difficult
El paraje de los Rodeos es precioso sobre todo con las recientes lluvias, pero además los truenos y relámpagos lo han hecho aún más emocionante. La compañía inmejorable.
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Scenery
Moderate
Julio, de diez. Hoy, también nos ha acompañado la lluvia, que solo hacía que mejorar el paisaje.