Elche De La Sierra Pura Vida¡¡ Sendas junto al río Segura. Vistas espectaculares, Villares, Rambla de la nava. A disfrutar¡¡

Magnífica mañana de diversión en compañía como no, de mis pura vida¡¡ En esta ocasión Juanto, Carlos, José y un servidor.
La etapa es similar a la de la btt del 2016, con algunos cambios con la senda de la umbría que se hace entera y la subida a Villares, con la bajada a la rambla. El segundo bucle se hace al final en lugar de al principio y es más corto y con menos pista, más bonito a mi entender, lo demás es igual, poco se puede aportar a este gran trazado.
Comenzamos pasadas las 8 de la mañana un día que es especial pues nuestro compañero Carlos se une al grupo con su flamante nueva Orbea Occan. Día de estreno y de reencuentro, hacía tiempo que no pedaleábamos con Carletes y a todos nos apetecía.
Empezamos a montar las bicis con la buena suerte de encontrar a José, un amigo de Juanto que salía de ruta en ese momento y que se apuntó con nosotros, por lo que nos hizo de guía de excepción. Gran compañero.
Salimos del pueblo buscando la subida a puerto López, que hacemos de charla y tranquilos, conociendo a nuestro nuevo compañero, que nos va comentando los detalles de las distintas zonas por las que vamos pasando. Un lujo para todos y un desahogo para mí que me olvido del GPS de momento. Comenzamos la bajada por el camino de hoya nevada y no tardamos en entrar en su senda. Trazado estrecho y sencillo, con algunos pasos un poco comprometidos en roca sin demasiada complicación, pero a trazar con precaución. Nos deja en una pista de bajada que nos lleva a cruzar el río segura por un gran puente y entrar en una zona preciosa junto al río donde los militares en ocasiones hacen maniobras. Zona de camino en umbría, con el suelo tapizado de hojarasca otoñal y con amarillos y ocres adornando nuestro paso. Una delicia. Llegamos a una bonita chopera y vemos una pequeña recua de caballos pastando tranquilos, nos hacemos unas fotos y damos gracias a la mañana, que por cierto va despuntando dejando paso a un bonito e incluso caluroso día para la ropa que llevamos.
Subida para buscar la zona de almazarán y entramos en su senda que va en ligera subida y suave bajada posterior siguiendo el río con buen firme y disfrute. Nos deja al pié de la zona de la muela, donde el segura se encajona y nos brinda unas preciosas vistas. La senda se complica y tenemos una subida empujando la bici. Hay que hacerla con calma y tranquilidad, disfrutando del paisaje y tomándose tiempo para descansar. No hay prisa.
Cuando lleguemos arriba tendremos enfrente al otro lado del cañón la loma de la muela, con un corte que se asemeja, salvando las distancias claro está, a la brecha de Rolando en Gavarnié, en el pirineo francés, justo encima del valle de Arán. A nuestra espalda y sobre nuestras cabezas tendremos la muela, la coronación rocosa de la peña que acabamos de subir. Es un buen sitio para tomar un bocado antes de bajar una preciosa senda. Tiene un par de zonas de curvas enlazadas en bajada muy bonitas, en general sin complicación, solo debemos llevar seguridad en la trazada. Firme de tierra con alguna roca suelta y para disfrutar. Llenos de senda y montaña llegamos a Los Bancalicos, un pequeño enclave hippie con un puente de madera que en esta época es una pista de patinaje. Muy resbaladizo cono bien saben las posaderas del bueno de Jose.
Tras el puente tenemos otra zona preciosa de vereda del río con todo el suelo tapizado de hojas y un colorido espectacular. La senda está muy cuidada y encontramos una zona de pasarelas de madera. Se nota que los lugareños cuidan su entorno, nosotros lo respetamos y lo agradecemos, intentaremos como siempre no llevarnos más que los grandes recuerdos y no dejar nada más que nuestro sudor.
Un poco antes de comenzar la subida a la Longuera encontramos una zona de troncos caídos bajo un gran árbol donde hay algunos bancos. Es otra zona donde reponer fuerzas y dar otro bocado antes de la subida de la Longuera.
Subida cómoda por pista que nos deja unas vistas espectaculares a la derecha, mientras salimos del cañón del río Segura. Primero subimos el camino de La Longuera, luego el de Yeste y por último de nuevo el de hoya nevada, que ahora nos toca subirlo en sentido contrario al de esta mañana. Llegamos a la senda de la umbría, rápida sencilla y sin desnivel, donde trazar con soltura y disfrutar¡¡.
La hacemos entera y nos deja frente a la pedanía de Villares. Aquí nos despedimos de José que regresa directo al pueblo, agradecidos por disfrutar de su compañía y de su conocimiento de la zona.
Los demás subimos por las calles de Villares donde tenemos dos fuentes para reponer agua. Bajamos en dirección a la rambla y encontramos una casa y una puerta de valla que nos cierra el paso, pasamos sin dificultad por la izquierda y bajamos a la rambla del arroyo de la anchura. Aquí tenemos tras una subida de bancales una bajada y un escalón en roca que puede ser puñetero si no lo vemos. Hay que hacerlo a pié.
Bajamos y entramos en la rambla de la nava. Arena como en toda rambla y después un paso estrecho y encajonado entre paredes de roca que es una delicia. Espectacular¡¡
Camino y salimos a la carreta de esta mañana que la hacemos de nuevo en dirección a puerto López y a la derecha sale un camino para hacer el segundo bucle.
Subiremos entre campos de olivos y monte bajo para hacer una bajada rápida en pista y de nuevo subida corta por camino para bajar por senda junto a más campos de olivos. Enlaza con una senda entretenida que nos baja al pueblo con zonas de buena pendiente, y nos deja con un buen sabor de boca para terminar de redondear una magnífica mañana de puro disfrute con mis pura vida¡¡
Agradecer de nuevo a José su compañía e invitarlo a repetir cuando guste.
Pura Vida¡¡