Embalse de Alsa desde Barcena de Pie de Concha por Camino Real y Lantueno

Ruta por la Cantabria profunda para conocer otro mas de los tantos parajes interesantes que esta región atesora.
Comienzo en Barcena de Pie de Concha, pueblo singular de la cuenca del Besaya que bien merece una vista mas detallada.Pueblo que bien podríamos llamar " del agua" ya que varios ríos tributarios y el mismo Besaya, se unen allí. El agua resuena y corre por todas partes.Los montes y hoces de fuertes pendientes invitan al aprovechamiento hidroeléctrico y su consecuencia, la profusión y contaminación de cables y torres eléctricas sobre el paisaje.
Casi de entrada tomo el histórico Camino Real, agradable y frondoso, con fuerte ascenso inicial que enseguida se suaviza; durante 5 km, atraviesa las abruptas Hoces del Besaya,por encima de la carretera general,cruzado por un bosque de torres y tuberías que conducen el agua hacia las centrales de generación.
Muy pronto, me incorporo a la N-611 y, en suave ascenso, atravieso Ventorrillo, Santiurde de Reinosa y Lantueno, por debajo de la autovía, salpicada de viaductos, y cerca del ferrocarril.
En Lantueno, se inicia una pista de fuerte pendiente,con algunas zonas pedregosas y húmedas de difícil ciclabilidad, que me lleva a los campos herbosos de la Peluca de Burdiejo, de amplias panorámicas sobre los pueblos antes indicados y los montes divisorios del Saja ( Collado Paguenzo y Pico Ropero) así como el vecino valle de Reinosa y Valdeolea.
Un poco mas arriba, en el collado de Gandarias y punto mas alto del recorrido, habremos completado 15 km de subida casi continua con 900 m. de ascension acumulada. Las vistas sobre el inmenso valle de Aguayo y sus montes circundantes- Jano, Otero y Mediajo Frio, son espectaculares. Ya se divisa el Embalse de Alsa.
Tras 1,5 de bajada por pista entre hayas y robles-embarrada en tiempo húmedo-llego al collado de Linarojo, collado de romántico paisaje con resonancias toscanas.
Abajo, San Miguel de Aguayo, en el valle quieto y majestuoso y con su preciosa iglesia románica.
Ya en llano, un sube y baja continuo me adentra en el amplio valle ocupado por el Embalse de Alsa. Espacio alpino singular, rodeado por cumbres y poblado por ganado que se aproxima al agua buscando el frescor o el agua, fuente de vida, sin mas. Brañas inmensas se elevan hasta las cumbres y dan idea de su riqueza ganadera.El agua, embalsada en Alsa y en el mas alto Mediajo, se precipitara hacia las centrales que pueblan las cercanías de Barcena.
Desde la cabecera del pantano tomo la carretera-llamada autopista del agua- que en rápido descenso, a la vera de profundas hoces y bajo la mirada del pico Jano, me conduce hasta Barcena.
Muy bonita ruta con un indice IBP de 71,sin exigencias técnicas pero que precisa cierta forma física.