Enduro Arrasate, un poco de todo

Hasta principios de septiembre de este año había estado en Arrasate solo dos veces en mi vida, pero en los últimos dos meses llevo ya 3 visitas, y en todas ellas he vuelto con la sensación de dejarme cosas en el tintero todavía para venir en futuras ocasiones. Para esta vez, hago una combinación de bajadas conocidas con otras nuevas, la mitad de ellas en la parte sur de pueblo, y la otra mitad en la norte, pasando por el pueblo entre ellas. Todas ellas comparten senderazos de escándalo, en general con pasos complicadetes de retorcer la bici como si fueras un local más. Y no siempre se consigue.

La primera bajada es Bakue, alargada con Azueta tras una breve conexión por pista. Ya la conozco bien de otras veces, es de la fijas, pero hoy con todo sequísimo y grandes nubes de polvo levantadas por los compañeros de delante, hacen que se baje con un poco más de cuidad.

Una vez abajo, enlace por pista hasta empezar a subir hacia el monte Galarixa, donde nos espera un precioso sendero de subida (Sugea, como en Eremua), que serpentea hacia la cumbre. Al inicio del sendero nos encontramos con varios montones de ramas cerrando el sendero, sin duda hay a alguien a quien no le gusta que pase la gente por ahí. Txingu, nuestro guía local, toma nota para investigar a quién puede estar molestando y porqué. Llegamos a la cumbre donde empieza la bajada Galarixa, en trailforks rojaoscuracasinegra. Por lo visto, es el patio de recreo de Markel Uriarte, que vive por aquí al lado, y enseguida entendemos porqué: curvas imposibles, donde todos los que intentamos hacerlas sin poner el pie vamos cayendo como piezas de dominó, afortunadamente sin consecuencias más allá de las risas de los compañeros. Por cierto, al volver a pasar por la entrada de Sugea vemos que en el tiempo en que hemos subido y bajado, alguien ha vuelto a colocar las ramas cerrando el sendero. En fin...

Para la tercera, subimos a Bedoña haciendo una parada en una fuente con unas vistas especaculares del Udalatz, para repetir Kurtxetxiki, que ya hicimos la última vez también. Es una bajada sin duda más sencilla en la que todos disfrutamos más sin bajar tan agarrotados por la ostia inminente.

Una vez completado el trío de bajadas por el sur del pueblo, bajamos y lo atravesamos para pegarnos el subidón del día ascendiendo hacia Udala por carretera. La parte buena es que en las tres bajadas de este sector iremos perdiendo altura poco a poco, con remontes más breves. Por carretera de charleta se sube bien hasta que nos desviamos al tramo final de Txukur, un sendero espectacular que va ganando altura con horquillas cerradísimas donde es un logro no sacar el pie al trazarlas. Nos hemos metido en un precioso bosque de quejigo y acebos que contrasta con la dominancia del pino de la otra vertiente. Quizás también por ser cara norte, se levanta menos polvo y el terreno parece un pelín menos seco, lo que se agradece. La bajada es cortita pero intensa, con más pasos de roca donde encarrilar la bici y que facilitan los giros. Distinta a las anteriores, muy bonita.

Volvemos a la pista por donde hemos subido para empezar a remontar a la bajada Enduro Bonus, primero por pista bastante dura hasta un cruce donde tomamos un sendero semitapado por la hojarasca del hayedo en que nos econtramos. Es necesario prestar atención al track y al tenue rastro de camino entre las hojas, es un sendero mucho menos transitado y se nota, pero es muy muy bonito.

Estamos ya en el inicio de la quinta bajada, con dos partes claramente diferenciadas: una primera de curveo made in Arrasate (es decir, de pasarlas putas para meter la bici), y una segunda de sendero rapidísimo a media ladera esquivando rocas a gran velocidad. Muy diferente a lo que hemos hecho durante toda la mañana, y en general a los senderos de la zona, se hace muy divertido!

Cruzamos la carretera y remontamos por pista al inicio de Birdinbide y Niña Bonita. Traemos a gente nueva, por lo que no dudamos en enseñarles Burdinbide, probablemente la senda más trabajada de todas las que haremos hoy. Así, tiene más saltos que la media, y aunque todos tienen escapatoria, esta vez nos acordamos bien y no dejamos uno "vivo". También pasamos por el drop de la laja a jugarnos la gran ostia en el último minuto, afortunadamente sin consecuencias. Caemos a la pista de Amporreta, por donde llegamos al parking de nuevo.

Ruta super variada, con vistas cojonudas y senderos de quitar el hipo. Tiene de todo, pero el nivel técnico general es alto o muy alto, por lo que la pongo como muy dificil. Hay fuentes en todo el track, por lo que se puede hacer prácticamente solo con un bidón, aunque algunos vayamos como camellos como siempre. Agradecer de nuevo a Txingu por su rueda, imposible de seguir para los mortales.