Enduro entre Eibar y Elgeta

Nueva vuelta de tuerca a la ruta realizada el agosto pasado por las inmediaciones de Eibar y Elgeta (https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/paredes-eibarresas-82513287). En aquella ocasión me encontré con una de las bajadas cortadas por obras, con lo que me dejó un poco de mal sabor de boca. Además, en esta ocasión también añadimos una bajada más y optimizamos las conexiones, por lo que sin duda esta es la ruta más redonda a día de hoy si lo que se quiere es disfrutar de 5 muy buenas bajadas por la zona.

Elegimos un día gélido, con una helada brutal y temperaturas bajo cero en la salida y que apenas superan los dos grados hasta bien entrada la mañana. La verdad es que tampoco supone un gran problema, ya que subiendo enseguida entras en calor, y las bajadas tampoco son para bajar a lo loco a 20 por hora. Es más, nos encontramos con que en muchas zonas el barro está congelado, lo que da un extra de grip que agradecemos. El coche lo dejamos en las cercanías del estadio de Ipurua, donde encontramos sitio para aparcar con espacio de sobra y nos ahorramos parte de la primera subida.

Subimos por carretera hacia Elgeta hasta coronar el puerto de Karabieta, donde nos desviamos por pista en busca de la cumbre de Goikomendi, a la que llegamos tras unos 8km y 1h de ascenso cómodo. El último tramo de subida es por sendero a través del pinar y tiene un rampón, pero el resto se hace sin forzar demasiado. Esta primera bajada la he hecho ya varias veces, es muy chula, con numerosos saltos (algunos muy grandes, nos acojonamos), zonas de curveo perfectamente peraltadas y algún drop grandecito. Nos sirve de aperitivo para lo que nos vendrá en el resto de la mañana.

Remontamos de nuevo hasta Elgeta por pista de hormigón donde salimos de nuevo al asfalto (muy poco tráfico) para luego desviarnos de nuevo por pista hacia las inmediaciones del alto de Intxorta. Aquí hay un par de buenos rampones a los que ha dado el sol, por lo que nos encontramos con barro que dificulta la tracción. Despacito y con buena letra llegamos al inicio de la bajada marcada con un cartel donde pone Urko. A diferencia del resto de bajadas, esta no la conozco, pero si hay cartel en la entrada, tiene que ser buena por pelotas. Y efectivamente, lo es. Tramos verticales se combinan con otros de curveo exprimiendo al máximo la ladera, en ocasiones atravesando robledales preciosos, y en otras por pinar. Como siempre, no faltan los drops y las curvas empinadísimas donde confías tu suerte a poder controlar la bici en el peralte de abajo. Una pasada.

Ya en la carretera, remontamos brevemente a Elgeta de nuevo, que atravesamos y ascendemos hacia el puerto de Karabieta. Poco antes de coronar, nos desviamos a mano derecha por una pista que luego se acaba senderizando y que nos lleva cómodamente a las faldas del monte Azkonabieta, coronado por una antena de comunicaciones. El último tramo de hormigón tiene una pendiente criminal, pero conseguimos subir hasta arriba sin echar pie a tierra. Buena opción la del senderillo, la vez anterior subí todo por pista y aunque quizás es algo más corto, sin duda es más bonita esta opción.

Comemos algo y nos lanzamos por Politte, una corta pero divertida bajada que nos hace perder altura rápidamente. Menos vertical que las bajadas anteriores y con más flow, la disfrutamos soltando los frenos un poco más y dejándonos llevar. Pena que sea tan corta. Aquí es donde en agosto me encontré con una bajada afectada por obras, por lo que busco la forma de evitarla rodeando el monte Galdaramuño por un bonito sendero por su cara norte que nos lleva al cordal del que salen las dos últimas bajadas del día: Unbe y La Ví.

En ambas hay que andar un poco atento al track para no pasarse el inicio de la bajada. Son bajadas parecidas, con muchísimo trabajo detrás y con tramos verticales y curvas de horquilla donde estrujar la bici al máximo. Unbe tiene una pequeña conexión por pista donde hay un par de saltos muy nobles en los que coger algo de vuelo, que no todo va a ser curveo. Luego llega al campo de fútbol, de donde sale el remonte más duro y poco agradecido del día: una pista forestal con un par de tramos de pendientes criminales que nos devuelve de nuevo al cordal donde estábamos.

Ahora, dejamos la entrada de Unbe a mano derecha y seguimos por el sendero hasta llegar al inicio de La Ví. De nuevo, ojo al track, que no es difícil pasarse la entrada, no demasiado evidente. La bajada es del pelo a la anterior, quizás más larga y con una última parte algo más asequible, pero las horas de curro que hay aquí metidas son acojonantes.

Y por si no hubiese sido todo perfecto hasta ahora, es caer en el asfalto de Eibar y encontrarnos de morros con un limpiabicis que nos permiten aligerar la carga de barro que llevaremos para casa. Una mañana redonda, con bajadas muy técnicas, pocos km, y más de 1500m+. Como siempre, con el nivel suficiente es una maravilla, si vas justito y no te gusta la sensación de no poder decidir tú el momento en el que parar la bici, no es tu ruta.