Enduro Jata desde Maruri

Tenía ganas de probar las dos bajadas del monte Jata, la verdad. Hace años que estuve por aquí con la bici, pero bajamos por pistas rotísimas y no guardaba buen recuerdo. La bajada recientemente recuperada desde casi la cumbre del Jata Txiki hasta el mar lleva tiempo poniéndome los dientes largos, y el DH, pues por mucho que me decía casi todo el mundo que está rotísimo y que no merece la pena, quería verlo con mis propios ojos.

Nosotros hemos alargado un poco la ruta saliendo desde la iglesia de San Lorenzo de Maruri, dando lugar a uno de esos engendros de ruta que me gustan y que mezclan enduro con un mtb más clásico. Quien quiera centrarse únicamente en las bajadas reduciendo al mínimo el pisteo, puede optar por esta otra ruta: https://es.wikiloc.com/wikiloc/rutas-mountain-bike/jata-enduro-bike-71699393?showFollow=1

Como digo, salimos de Maruri y sin tiempo para calentar, empezamos a subir por pistas por la cara oeste del Jata. Pistas agradables con las que calentar las patas y que nos acaban bajando a la carretera de Lemóniz poco después, de donde empieza la subida "de verdad". Tras unos metros de asfalto, enseguida nos desviamos a la derecha y subimos de forma relativamente cómoda por las "13 curvas" hasta el merendero, donde continuamos el ascenso hasta casi la cumbre del Jata Txiki. Poco antes de llegar al buzón, nos desviamos a mano derecha por un sendero que enseguida descubrimos que tiene un problemilla si ha llovido recientemente. Es un sendero recién abierto, por lo que el terreno aún no se ha asentado bien y estaba tremendamente blando, formándose un barrizal de barro negro en el que costaba controlar la bici. Definitivamente, solo se puede hacer en tiempo seco, al menos hasta que compacte bien el terreno.

Con cierto sentimiento de culpabilidad por haber contribuido a empeorar el estado de la bajada, llegamos a la pista del merendereo y aquí la cosa cambia. El sendero tiene más "solera" y ha aguantado mucho mejor el agua, por lo que nos quitamos el mal sabor de boca que nos ha dejado ese primer tramo. Zonas con flow, otras con grandes rocas, sendero clásico de pinar que tras cruzar la carretera por momentos asoma al borde del acantilado y es una auténtica delicia. Bajamos y bajamos hasta llegar a un punto en el que ya no se puede continuar más sin mojarse, asomando al mar en una espectacular desembocadura de un arroyo que, tras varios saltos de agua y un par de pozas, cae directamente al mar (salto de Uredaridxone). Un rincón precioso que a pesar de conocer la zona, descubrimos gracias a esta ruta.

La parte mala es que no hay más salida que remontar bici al hombro brevemente el camino por el que hemos bajado hasta desviarnos a mano derecha por un sendero que acaba conectando con una pista que nos sacará a la carretera, en ocasiones en paralelo al sendero de bajada. Es un remonte duro, pero merece totalmente la pena hacer la bajada entera. Cruzamos la carretera y seguimos ascendiendo por la pista principal hasta llegar, esta vez si, a la antena, donde nos espera otro pequeño porteo (2') hasta la cumbre.

Disfrutamos un buen rato de las espectaculares vistas de Bakio y San Juan de Gaztelugatxe para calzarnos las protecciones y enfrentarnos al famoso DH de Jata, que tantas ganas tenía por conocer y valorar de primera mano si merece la pena o no. Es una bajada muy muy técnica, con grandes rocas con muchos sitios donde hacerte daño si caes. Por si ya de por si la bajada no tuviese suficientes dificultades, está destrozada por el paso del tiempo y, sobre todo, de las motos, que acaban por hacer casi imposibles algunos pasos. Personalmente, tengo que desmontar en al menos 3 pasos que recuerde, donde el riesgo de gran ostión y dolor es considerable, pero mi compañero cae a las primeras de cambio y ya baja con el agujero del culo cerrado durante el resto de bajada, por lo que avanzamos con lentitud. En ocasiones incluso dudamos si estamos siguiendo el track correcto o nos hemos metido en una línea equivocada. Solo al final se conservan algunos saltos y peraltes que le confieren cierto flow, es una pena que el resto de la bajada esté tan desguazada.

Una vez en la zona de barbacoas, perdemos rápidamente la cota que nos queda para luego ascender un muro de hormigón en la subida hacia la ermita de San Miguel. Un buen calentón que no gustará un pelo a los endureros menos en forma. En la ermita hay posibilidad de coger agua (y aire para quien lo necesite) antes de bajar por pistas hasta la carretera de Maruri que seguiremos unos 3-4km hasta el coche. Antes de llegar a la carretera, nos salimos de la pista por un sendero a mano derecha que nos lleva a una casa rural para luego volver a la pista, por un tramo que hice hace unos años pero que nos encontramos cerrado y tenemos que improvisar y aparecemos en la puerta de la casa rural. Aunque nadie nos ha llamado la atención, tengo dudas que no nos hayamos metido por propiedad privada, por lo que quizás mejor seguir por la pista a la que volvemos a salir.

Como resumen de la ruta, me llevo la experiencia de la primera bajada y el espectacular enclave donde acaba, y el haber visto con mis propios ojos el estado del DH. A la pregunta del millón de si volvería a hacerlo, la primera bajada con los ojos cerrados (en seco), pero el DH creo que no, al menos hasta que lo arreglen, que he oido que lo harán este verano. La dificultad la pongo como muy dificil por esta bajada. La primera no tiene gran dificultad, sería moderada.