Epele - Malbazar - Goizueta - Zumarresta - Zubieta - Bidasoa - Oiartzun

Una ruta larga pero no muy exigente, para quemar grasas.
Saliendo de Ametzagaña bajamos a Loiola y por la pista que va junto a las vías del tren llegamos a Epele, subimos por un camino inicialmente asfaltado y luego carretero que nos lleva hasta el restaurante Mugaritz. La pista hace años estaba bien, pero en estos momentos más vale evitarla, o bien llevar las piernas protegidas para ortigas y zarzas. Lástima, porque es ciclable, discurre entre hermosos bosques y no tiene apenas pendiente.
Una vez en la carretera de Landarbaso llegamos a Malbazar y bajamos a Añarbe por una senda que si no la conocéis, os perdéis algo bueno, estrecha, limpia y divertida hasta el embalse.
Cruzado el embalse llegamos a la carretera de Goizueta y unos km más adelante nos desvíamos por el puente que da entrada a la central hidroélectrica de Zumarresta. Subimos junto al río del mismo nombre desde su muerte en el Bidasoa hasta su nacimiento en la cota de 700m. Camino ancho, limpio y con pendientes moderadas hasta casi el final. Yo no tuve que bajarme de la bici y soy de los de pie fácil.
En este valle estrecho lleno de bosques de robles, hayas y castaños, las construcciones, muros, caseríos y bordas están hechas de pizarra, porque es el material más abundante. Todavía muchos tejados están cubiertos con láminas de pizarra dándoles un aspecto más ancestral.
Finalmente bajamos a Goizueta por una pista parcialmente asfaltada y de ciclar muy agradable. De allí a Doneztebe no falta mucho, donde cogeremos la vía verde del Bidasoa hasta Irun.
En Irun elegimos una ruta para llegar a Donostia que nos evite el tráfico de la nacional, así que vamos por la GI-3452 hasta desviarnos cogiendo el camino de Santiago del Interior con rampas importantes a estas alturas del día.
Bajamos a Oiartzun, cogemos el bidegorri de Arditurri y hasta Intxaurrondo.
¡Bonito día!