Etapa 7 Epic Race 2019 Ponteareas-Redondela

Etapa con un primer tramo muy rápido en llano y una segunda parte con tres subidas importantes. El ciclista debe saber gestionar las fuerzas en la primera parte reservándose, sobre todo, para el primer ascenso.

Salimos hacia el Sur y nada más arrancar cruzamos el puente de Os Remedios, en Ponteareas, de origen romano y que nos da una idea de esta milenaria ciudad enclavada en el margen del río Tea. Atravesamos el puente de nuevo, esta vez bajo uno de sus arcos, comenzando así un largo tramo que nos lleva por el margen del río, alternando tramos revirados con otros rectos y muy rápidos.

En el kilómetro 14 abandonamos la senda fluvial para enfrentar un tramo de asfalto entre pueblos, volviendo a continuación a la ribera de un río, en este caso el Miño. De nuevo los caminos son muy rápidos, llanos y sin dificultades técnicas.

En el kilómetro 30, después de un tramo de enlace por asfalto, llegamos a la primera subida de la etapa y la más larga y dura. Nos enfrentamos al Monte Aloia, primer parque natural de Galicia, fundado hace más de 40 años y un magnífico ejemplo de como convertir una zona desolada en un vergel.

Ésta atalaya es la puerta de entrada al impresionante macizo granítico de la sierra de o Galiñeiro, por la que circularemos durante los siguientes 24 kilómetros, enfrentando en este trayecto dos subidas. La primera, que nos lleva a la parte alta del parque natural, tiene tramos de fuerte pendiente que se alternan con zonas relajadas.

Coronamos en el kilómetro 40 afrontando a continuación un rápido y cómodo descenso de 3 km que nos acerca a la base de la segunda subida de la etapa, 10 km de subida tendida por pista forestal y con alguna pequeña bajada revirada, que le pone la sal a nuestro recorrido por este espectacular balcón sobre el Atlántico y el valle de Porriño.

Abandonamos la sierra en el entorno del embalse de Zamáns, comenzando el último ascenso de la etapa. Primero por asfalto y luego por cómoda pista forestal nos acercamos al último descenso abandonando los montes que separan la ciudad de Vigo y su costa de la falla conocida como Depresión Meridiana que, durante milenios, ha definido la principal vía de comunicación entre el norte y el sur de la provincia y en el que Redondela ha jugado un papel esencial tanto por vía marítima como terrestre.