Fresneda de Río Tiron a Pozo Negro

Ruta sencilla y agradable por una entorno natural estupendo. Suficientemente variada.
Un gran día con muy buena compañía.

DESCRIPCIÓN DE LA RUTA

Salimos de Fresneda por la carretera, para enseguida tomar una pista a la derecha, llanear un poco por buena pista, y a los 3 km desde salir empezar una subida de 12 km.
El firme en la subida es muy bueno, y sólo recuerdo una pendiente que se hizo algo dura, ya bastante arriba.
Cuando ya hemos subido un poco, las vistas al valle del Río Tirón sun estupendas, y además ya empezaban a marronear los hayedos más altos, se oía la berrea al fondo del valle, y había algunos árboles dispersos de un color rojo espectacular (Servales de los cazadores?).
Cuando se llega al Collado de las Cenáticas, como ya me pasó en otra ocasión, la vista de una larga subida impone, aunque luego no es para tanto (1,2 km al 6,6% de media; fotos 1 y 2).
Poco después de esto, llegamos a un cruce, ya cerca del Alto de la Cruz de la Demanda, donde al fondo se ve nuestro destino, la laguna de Pozo Negro, en un lugar muy tranquilo y agradable, donde alguno disfrutó de una mini siesta.
La subida desde la laguna no es de lo peor (foto 3, se ve el primer tramo de subida, lo único duro), pero sí nos quitó las ganas de subir hasta la cima del pico Otero, como teníamos previsto, así que de nuevo en el cruce, empezamos la bajada por el mismo sitio por donde subimos, para en seguida desviarnos a la izquierda, por una pista menor y bastante más divertida, aunque sin dificultades (foto 4).
Es posible que se pueda ahorrar la subida de nuevo hasta el cruce antes comentado tomando, desde media subida desde Pozo Negro, una pista a la izquierda, pero no estábamos seguros ni teníamos tiempo de aventuras, y en Google Earth tampoco se ve claro si comunica con la pista que baja luego junto al río Tirón.
En cualquier caso, por esta pista mucho menor llegamos hasta la vera del río, justo cuando empiezan a aparecer hayas, y mejora a la vez la pista, ya similar a la de la subida.
Paramos cada dos por tres, porque en descenso es imposible valorar lo agradable del cauce del río entre hayas.
Finalmente, ya casi abajo del todo, algo después del refugio de Tres Aguas, la pista cruza el río buscando unirse con la recorrida por la mañana, pero nosotros, siguiendo un track, seguimos por el mismo lado del río, por un sendero muy divertido, con algunas subidas y bajadas, algo embarrado en algunas zonas, pero con hierba resbaladiza en otras y con bastantes helechos (foto 5). Muy agradable, y nos deja finalmente en el pueblo, junto al lavadero, donde habíamos dejado el coche. Y como es un lavadero, pues a lavar las bicis, que se nos habían embarrado en el último sendero.

Cerveza y un picoteo en el pueblo, y ruta, que ya era tarde.