Gascueña de Boronova-Norte -La ruta que se libró de la quema- 35km

Fuí ha hacer la ruta a ver como le afectó el incendio de principios de verano, y pese a que sube a la sierra que se quemó, lo hace por el lado que se salvó. además quería arreglar algunos tramos de la ruta que hice anteriormente, que me gustó bastante. Para salir del pueblo, subir a la iglesia y poco antes de llegar giras a la derecha por carretera asfaltada hasta salir del bonito pueblo, aprovechando para coger alguna pera y manzanas, después de subir a la carretera pude ver como la lengua del odiado fuego se quedó a las puertas del pueblo arrasando casi toda la sierra, bajé por carretera un tramo para desviarme a la izquierda por camino empinado, pues ya que hay quie bajar que sea por trialera, en efecto, arriba me esperaba la trialera que bajaba al siguiente pueblo, desviándome a la derecha después de pasar pequeño tramo quemado por bonito bosque de grandes robles y bajando a la carretera, pero antes de llegar al pueblo giré a la derecha para subir por ancha y cómoda pista hacia la teinada, me entretuve hablando con gente del lugar que estaban junto al pueblo, según decían la noche del incendio hizo mucho viento. La llegar a la Teinada subí al alto para bajar por camino trialero hasta el río, había como un riachuelo, lo pasé justo a la izquierda, aprovechando para romper ramas secas después del verano, me resultó fácil cruzar pues el nvel del agua estaba bajo, seguí descalzo por la hierba hasta secar los pies, me puse de nuevo los botines y subí por bonito y escondido valle lleno de animales, imagino que huyeron de las zonas quemadas, arriba seguí por la cuerda de bosques de pinos y me desvié por trialera hacia abajo, pero me detuve a medio camino para buscar campo través un camino en medio del bosque que me lleva cómodamente por unos paisajes increibles hasta el ancho camino de la teinada que tomamos antes. Amenazaba tormenta con negros nubarrones zumbando rayos y descargando por la zona de los condemios, al llegar al camino el fuerte viento me impedía avanzar, hasta llegar al resguardo de un monte que rodeé subiendo a un puerto, luego bajé para subir otro pequeño tramo, pasando por estrecho camino entre paredes de zarzas con buenas moras, al llegar arriba el camino mejoraba bastante y el paisaje también, pudiendo ver el profundo valle donde bajé a toda leche mientras lloviznaba pero dejando atrás la molesta tormenta, abajo rodeé valla de antigua fábrica de plata "la constante", donde hay un increible puente que me llevó seco al otro lado, subí por empinada cuesta para tomar un bonito camino entre robles que me llevó de vuelta.