Hasta el Puente de la Cantina por la Cueva del Monje

Como ayer me supo a poco subir sólo hasta la Cueva del Monje hoy decidí hacer "algo" más...
Así que volví a subir por la carretera forestal muy bien asfaltada que lleva hasta la Cueva del Monje y decidí seguir patapum parriba...
Qué mala costumbre tengo de no parar ni en las caídas porque hay unas vistas pesiosas pesiosas de los Claveles, Peñalara, pinos que imitan a los chopos, puentes romanos, el arroyo La Chorranca con buen caudal, la Fuente de la Peseta,...
En torno al km 17 se acaba lo asfaltado y da paso a piedra suelta, desconchones, algo de arena (bueno, un camino en buenas condiciones o una carretera chunga...).
Así hasta que leas el típico cartel: "CICLISTA recuerda que no vas solo, modera la velocidad" donde ya sabes que viene una bajada.
Controla un poco por esa razón y porque hay mucha piedra suelta, arena y hoyos que hacen las curvas muy peligrosas a más de 40km/h.
Se suceden bajadas y subidas que te hacen cambiar de plato y piñones continuamente durante unos 4 kms...hasta que vuelves a entrar en una carretera forestal bien asfaltada donde tienes que controlar un poco la velocidad porque puedes pillar los 70km/h sin dar pedales y si vienen caminantes (no, los “guolkim ded” no, los otros...), otros ciclistas o ganado que pasta por allí puedes tener un accidente serio.
En el km 21 (o poco más) decidí dejar la carretera forestal y girar a la derecha por un camino, en principio ancho, que me llevó por veredas sinuosas, bajadas muy pronunciadas, con laterales empinados, piedras sueltas, raíces, vegetación, cachos de ramas, riachuelos, toyas embarradas y subidas cortas pero durillas (tienes que estar atento a cambiar a molinillo en un pis pás si no quieres echar pie a tierra, que lo echarás…).
Hoy me he acordado de ti más que nunca Manu, lo que hubieses disfrutado tú por esta parte…
Suelen salir varios "ramales" a lo largo de esta vereda, aunque creo que todos van más o menos al mismo sitio. Me di cuenta de que pasé por encima de la Fuente de los Mosquitos (donde el Puente de la Cantina). Estos caminos y veredas van paralelos a la carretera que une Valsaín con Navacerrada y aunque mi intención era llegar a Valsaín salí a la carretera un poco antes de Los Asientos. Poco después, en Valsaín se vuelve a tomar el camino que va por la derecha.
Ruta durilla y segunda parte bastante técnica pero preciosa que pone a prueba tus habilidades y libera adrenalina.
No olvides llevar unas gafas transparentes porque la mayor parte se rueda por zonas sombrías pero con muchos mosquitos (y demás bichos voladores) donde es necesario ver lo mejor posible y llevar protección ocular.