Huetor - IBP 65 fit 43 - 14/02/14 - La Vega (Made In García-Ubago)

No hay cosa mejor que salir con la bicicleta sin saber exáctamente donde se va e ir toda la ruta cogiendo caminos y senderos sin saber exáctamente donde se va, que se lo digan a Isaías y a un servidor que exáctamente hemos hecho eso, no tener ni idea de donde ir.... que miedo¡.



Pues así hemos comenzado, preguntándonos ambos donde ir sin tener mucha idea, y como tenemos un poco de saturación de rutas por las zonas donde el tiempo nos deja, hoy nos hemos ido a la Vega, a "emborrizarnos" como las croquetas y lo hemos conseguido, hemos dejado las bicicletas irreconocibles.

Salimos de la Zubia y hablando hablando nos vamos sin rumbo fijo camino de loma linda, donde cogemos la vía de servicio dirección Alhendín para coger un poco de ruta de "los conejos", que hoy había pocos y con un terreno en un principio no muy húmedo y con un viento de cara que no nos dejaba avanzar nada.


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A la primera de cambio nos desviamos a la derecha y comenzamos nuestra andadura por la vega camino de la Malahá, con monte vive justo a nuestros pies poniéndonos pronto en el pueblo. Ya en el pueblo vemos en la lejanía una rampa que sube hasta dios sabe donde, así que nos ponemos a investigar a ver donde cogerla. En nuestro camino cogemos el carril bici de la Malahá que nos lleva a los baños de la Malahá, donde una horda de señoras tienen tomado el carril si o si, así que decidimos pronto coger el carril que al habernos pasado unos metros tomamos más adelante otro que subía para un olivar.

Aquí comienza nuestra primera púa del día, un rampón entre olivos de un 28% en recto y con la tierra que se te hundía la bicicleta. A mi se me iba a salir el corazón por las orejas, pero lo hemos subido¡. Son unos 85 mts en recto hacia arriba que son durísimos.



Una vez tomamos altura seguimos por carriles que no habia visto en mi vida, entre barro en zomas umbrías, mucho barro que hacía que la bici no se moviese una leche. A medida avanzamos hay muchos cruces y carriles que nos hacen que vayamos "intuyendo" por donde ir, hasta que vemos un vertice geodésico y decidimos ir para allá. El vertice de los Miguelinos, que no podemos subir porque el carril era un infierno marrón de barro, así que desvío unos metros abajo y lo tenemos que bordear. La vega está de cine, verde verde y desde ahí arriba las vistas son preciosas de todo el Temple, ventas de huelma, agrón, escuzar, todo un lujo para la vista.

Seguimos entre verdes prados hasta otro desvío del carril que nos seguirá llevan por más y mas carriles, entre barros, charcos y rodaderas, eso si, todo ciclable, hasta un olivar que descendemos unos 200 mts hasta el cortijo de Ánima, un descenso impresionante que con un 25% de desnivel hacía que tuvieses que dar pedal de la de barro que tenía.

Ahora venía lo mejor, como ibamos bien de tiempo decidimos cruzar la carretera y seguir por carriles y cruzar el río, con medio metro de barro y agua, que ha hecho que las bicis no fuese bicis, fuesen 2 croquetas y media pierna de agua, eso sí, sin tocar suelo, en la bici montados¡.

Después de esto nos tocaría un buen tramo seguir por un barrizal de mil pares de narices, pero apretando se hace montado para ver lo que nos esperaba, unos 150 mts. con unos 100 mts. finales al 33%, casi vertical donde hemos tenido que hacer encaje de bolillos para llegar a otro vertice geodésico, el del tesorillo.

Ahí no quedaba la cosa, porque para ir en dirección a las Gabias nos metemos por la colada Llano Llevas habría otro barrizal mas de mil pares de narices.

Al final para la vuelta la hacemos por el río Dilar, cruzando la Base Aérea y volviendo por loma linda con un viento de cara que sería la puntilla final para llegar a casa.

En general la ruta no es nada fácil, con viento de cara, barro por todos sitios y 2 rampas impresionantes hacen de la ruta que sea otro reto más García-Ubago¡

Otra más!