IBP 144, JUN-LEÑADORES-ESPARTERA-ERMITA VIEJA-VEREDA MURETES-OTURA-JUN (GRANADA MTB)

Salimos a las 10 desde la Caleta sin prisas pero sin pausas puesto que queremos estar en casa para comer. La idea era retomar la zona de la Zubia que tanto tiempo hace que no visitamos.

Nos dirigimos la avenida Cervantes dirección Monachil para enfilar el polígono industrial de las Canteras en la Zubia. Desde aquí, tras un tremendo rampón asfaltado, dejamos el asfalto para coger el camino de los Leñadores por la linde de un precioso pinar y enfrente de la loma por la que discurre la subida asfaltada a Cumbres Verdes.

Tras un cruce con otra pista, el pedalear continua por una senda de firme que alterna piedras con raíces y tierra compactada por las recientes lluvias. Poco a poco, a medida que rodeamos Cumbres Verdes, la senda se convierte en trialera al coger el barranco de Satajardas. Hay un par de troncos cruzados que nos permiten recuperar el aliento, porque la subida es constante con algún traicionero repecho que otro.

Así llegamos a la pista que lleva al Hervidero que es un ídem de ciclistas y senderistas. Poco a poco, charlando y riendo, llegamos al mirador del canal de la Espartera en el que no cabe un coche más.

Nos dirigimos a la vereda que rodea la Boca de la Pescá por su vertiente norte, acompañando el canal hasta un collado en el que se precipita al Dílar para generar electricidad. Le echo el guante a una sendita que va junto al mismo para ver si es ciclable/pateable, puesto que google earth (peligroso aliado del ciclista de montaña) muestra un zig-zag en bajada hasta el Dílar.

Seguimos por un cortafuegos que han acondicionado y puede bajarse entero sin bajarse (más o menos, ¿no Juanlu? XD ) que nos deja en el area recreativa del mirador del Collado del Fraile. No parece que atraiga a muchos senderistas, pero tiene una fuente de agua muy fresca.

Tras tirarnos por asfalto a todo lo que dan las bicis hacia el cortijo de Macairena, nos desviamos hacia el río Dílar siguiendo las claras indicaciones de la IMBA (las del triangulito rojo).

Acompañamos al río hasta que llegamos a la casa forestal y la cosa se pone seria. Son casi 40 minutos de subida a la Ermita Vieja, pero yendo a ritmo tranquilo.



Nos paramos en una alberca muy bonita situada junto a un pradito de lo más curioso. He olvidado marcar un waypoint, pero dejo pantallazo con su localización.



Una vez arriba repostamos y nos echamos un plátano isotónico para iniciar la bajada. Al llegar a un desvío por una trialera que no conocemos, nos metemos en ella a todo meter. Es rápida y muy asequible y discurre gran parte en paralelo a un muro medio derruido. Acaba en un empinado cortafuegos (menos mal que de bajada) con bastante barro, así que ojo si las lluvias son abundantes y recientes porque tiene pinta de convertirse en una pista de patinaje artístico.



Nos desviamos hacia Dílar y, error mío, en la venta La Mimbre nos tiramos hacia Otura en vez de hacia Gójar... lo que nos hace perder tiempo, aunque alargar la ruta algún kilómetro adicional.

Ruta físicamente durilla (ver los dos cuernos diabólicos del perfil), pero técnicamente bastante asequible y sobre todo MUY DIVERTIDA.

¡Nos vemos en el campo!

Gracias a LosK2delasKumbres por enseñarme (¡¡por fin!!) a insertar imágenes en el texto. ¡Gracias compañeros!