II MARCHA BTT CANDIDATURA RESERVA DE LA BIOSFERA DE LA SIBERIA

Ruta espectacular por el corazón de la RESERVA DEL CÍJARA.

Sólo el hecho de llegar en coche a Villarta de los Montes, localidad en la que comienza y termina la ruta, ya nos va a poner en antecedentes de los paisajes que nos esperan.

Con un recorrido sin ninguna dificultad técnica, al poco de comenzar ya disfrutaremos de lo va a ser la tónica habitual del día: cuestas más o menos largas pero siempre tendidas que se alternan con bajadas rápidas y siempre rodeados por sierras llenas de verde, verde y más verde.

En este hábitat natural donde el avistamiento dé cérvidos es frecuente, encontramos varios rincones escondidos que son auténticas joyas de la naturaleza.
El primero de ellos hacia el que nos lleva la ruta es el denominado "estrecho de las hoces", estrecho tallado por el río Guadiana a lo largo de los años y que ha formado unas impresionantes paredes de 100 metros de altura. En la parte baja, junto al río, existen varios merenderos y zonas acondicionadas donde hacer una merecida parada a avituallarse y disfrutar de las privilegiadas vistas que nos ofrece el enclave.
Tras abandonar esta zona de merenderos, volvemos a subir por el mismo lugar por el que hemos bajado, la subida es larga pero tendida, por lo que no ofrecerá mayor dificultad. Al finalizar esta subida, la ruta nos hará el segundo de los grandes regalos de la jornada, pues subiremos hasta un mirador en el que podremos contemplar desde la altura el trazado del río Guadiana atravesando el corazón de la reserva del Cíjara en varios kilómetros de longitud. La ruta en sí es muy bonita, pero estos dos parajes son espectaculares y sólo por conocerlos ya merece la pena hacer la ruta.

Tras el deleite para lo sentidos que nos hemos llevado del mirador, el resto de la ruta ya transcurre sin apenas dificultad y con predominio de bajadas hasta llegar de nuevo al punto de salida.

Ruta ideal para hacer en plan cicloturista con la grupeta, aunque ello no significa que si quieres "calentarte" no lo vayas a poder hacer, pues salvo por la parte técnica (que no tiene ninguna) la orografía de la zona te va a permitir que puedas poner a prueba tu estado de forma.

El recorrido es completamente público, pero dada la gran cantidad de caminos y pistas forestales que existen en la Reserva del Cíjara, lo ideal es seguir un track concreto o ir acompañado de alguien que conozca bien la zona.