La Antena de San Serván (Puerto)

Ruta MTB diseñada por el Club Ciclista La Antena de San Serván con inicio y final en Arroyo de San Serván (Badajoz), que asciende y desciende el puerto conocido como "La Antena". La Antena de San Serván es el puerto al que rendimos tributo en el nombre de nuestro club, y está situado en la Sierra de San Serván, en el término municipal de Arroyo de San Serván, en la provincia de Badajoz, en Extremadura. Su recorrido partiendo desde la localidad de Arroyo de San Serván es de 3.7 kms aunque por tradición se ha dicho siempre que el puerto comienza en el cruce con la actual circunvalación siendo su longitud de 3.5 kms. Sobre esta distancia se ascienden 365 metros de altura por lo que su pendiente media es de un 9.86%. Aunque actualmente en la cima de la Sierra de San Serván se pueden encontrar muchas antenas de telecomunicaciones, inicialmente y durante décadas solo hubo una, que fue instalada junto a la ermita de los Mártires San Serván y San Germán cuando aún no existía la pista de tierra actual, la cual fue construida en los años 80, por lo que siempre en la zona nos hemos referido a tal subida como "La Antena". Hasta hace poco el puerto era por completo de tierra, hasta la construcción a principios de siglo de la casa rural "Los Pocitos", cuyo acceso contribuyó a asfaltar prácticamente el primer km de subida quitando dureza a dicha parte de la misma, y el cual ha acogido en una ocasión una pequeña etapa contrareloj de la Vuelta Ciclista a Extremadura. La vegetación que podemos encontrar durante toda la subida es la característica de la zona, encinas, tamujo, retama, jara, cantuesos, ahulagas etc. El paisaje es impresionante al tratarse de una sierra rocosa con una altura considerable en mitad de una gran llanura. Las vistas desde la cima son espectaculares, sobre todo si miramos al valle que se forma hacia el sureste. Desde allí se observan los embalses de Alange, los Canchales, Proserpina y Cornalvo, así como la mayoría de las localidades de las Vegas Bajas del Guadiana y Tierra de Barros. A pesar de ser "corta", la subida es todo un reto, con una pendiente media bastante elevada y con una gran cantidad de tramos y rampas durísimas, con la dificultad añadida que proporciona un terreno de tierra pedregosa con abundantes grietas producidas por el correr del agua en invierno.