La Beguda Alta, La Beguda Baixa, Sant Joan Samora, Sant Llorenç d'Hortons, Sant Esteve Sesrovires, Can Prats, Martorell

Inicio: Estació La Beguda de los FGC
Fin: Estació Martorell Enllaç de los FGC

Empezamos esta ruta marcada por los viñedos del Penedés en la minúscula estación bajador de La Beguda de la linea de l'Anoia de los Ferrocarriles de la Generalitat. El trayecto en tren es precioso con excelentes vistas panorámicas del Baix Llobregat y sobre todo en el tramo de Martorell a La Beguda con el macizo de Montserrat siempre presente.

Desde la estación subimos una empinada rampa hasta La Beguda Alta. Es un pequeño vecindario cuyas "calles hasta el 2018 pertenecían a 3 términos municipales que a su vez son límites comarcales, Sant Esteve Sesrovires (Baix Llobregat), Sant Llorenç d'Hortons (Alt Penedés) y Masquefa (Anoia), este embrollo se resolvió finalmente y en la actualidad están adscritos a Masquefa. no se si en Catalunya abundan casos tan curiosos de geografía política!

tomamos la carretera B-224 en descenso hasta La Beguda Baixa. Su principal reclamo es el club de golf Masia Bach y la urbanización del mismo nombre, no es nuestra intención desviarnos hacia estos objetivos, pero paramos en la carretera para cumplir con la tradición de desayunar en "Cal Ciclista", el restaurante Cal Vidal - Ramos que ofrece desayunos de "forquilla" y buenos bocadillos. A pocos metros está situada la bodega Castell d'Age con tienda para la venta directa, es el primer esbozo de una ruta marcada por vinos y viñedos.

Satisfecho el paladar, salimos por la misma carretera B-224 en dirección a Sant Esteve hasta localizar a nuestra derecha la carretera BV-2251 en dirección a Sant Joan Samora, nada más iniciar el tramo aparecen lo que andamos buscando, viñedos y olivares, un suave descenso de 1 km nos lleva hasta el pequeño vecindario de Sant Joan Samora perteneciente al muncipio de Sant Llorenç d'Hortons, todo lo que nos rodea es viña en terrenos de leve ondulación pero con la altura suficiente para tener en el horizonte la permanente vista de Montserrat al norte y las montañas de l'Ordal en la vertiente sur.

fincas de viñas principalmente de las variedades blancas del cava acompañadas de olivos, masías dedicadas a la elaboración del vino, algunas con nombre y apellido, otras sin indicación que nos permita adivinar marcas comerciales. Junto a una de estas masías, la carretera pierde el asfalto y se convierte en camino, un recorrido muy agradable rodeados de viña que culmina en la espectacular masia de Can Rimundet con historia desde 1520 y estrechamente vinculada a la viticultura,

La propiedad de más de 100 hectáreas nos ofrece más que viñedos ya que en su vertiente sur ofrece zonas boscosas y como gran aliciente el Salt de Can Rimundet, un salto de agua de 4 metros de la riera rierussa que culmina en una amplia piscina natural que a pesar de los avisos de no bañarse es ampliamente disfrutada por humanos y sus mascotas. Por encima de nuestras cabezas destaca un imponente viaducto de la linea del tren de alta velocidad para sortear el desnivel del terreno, así de fuerte es el descenso para llegar al gorg.

Subimos por el mismo camino hasta localizar a la derecha un camino que nos permite seguir el trazado del AVE, nueva subida hasta cruzar por un puente la vía férrea, otro descenso poderoso y una nueva subida rompedora nos permite alcanzar el Camí de Sant Joan Samora a Can Bargalló, lo tomamos en dirección norte hacia Sant Esteve.

Cruzamos un nuevo puente sobre el AVE desde el que se divisa a lo lejos el polígono de Sant Esteve, nuevamente en subida seguimos bordeando viñedos e incluso disfrutamos de la sombra de una pineda poco antes de alcanzar el cruce de caminos junto a la capilla de Sant Joan Samora, tomamos el camino de la derecha junto a las instalaciones de la bodega Sant Joannes que nos lleva hasta la carretera B-224 justo antes de la rotonda de acceso a Sant Esteve Sesrovires.

Tomamos la carretera de Sant Esteve, la BV-2293, buena bajada hasta el puente sobre la riera para ascender después hasta el centro de la localidad donde visitamos sus principales calles y la bodega de cava Roger Goulart. Abandonamos el pueblo por el camí del cementiri que nos conduce en frenético descenso hasta el torrent dels Llops. Hay un cruce de caminos para decidir si circular por la riera o volver a ascender, dedicimos lo segundo y el camino nos lleva hasta el vecindario de Can Prats, por cierto la fuente de la placita es generosa en agua y nos refresca después de tanto esfuerzo a pleno Sol.

Circulamos por el camí de Can Prat hasta el polígono industrial de Sant Esteve, volvemos a tomar la carretera B-224 en dirección Martorell, entramos en la localidad y buscamos la estación más cercana, en este caso la de Martorell Enllaç de los FGC