Activity

Larva - Alamedilla - Puente Hacho - Cabra - Larva

Download

Author

Trail stats

Distance
46.54 mi
Elevation gain
3,694 ft
Technical difficulty
Moderate
Elevation loss
3,694 ft
Max elevation
3,627 ft
TrailRank 
21
Min elevation
1,972 ft
Trail type
Loop
Time
5 hours 50 minutes
Coordinates
5964
Uploaded
March 3, 2022
Recorded
March 2022
Be the first to clap
Share

near Estación de Larva, Andalucía (España)

Viewed 38 times, downloaded 2 times

Itinerary description

Atravesamos Larva y en dirección a Cabra del Santo Cristo y comenzamos la ruta unos kilómetros más adelante, donde la carretera hace un giro a la derecha para cruzar la vía del tren. Ese será nuestro camino de vuelta.
La pista por la que empezamos a rodar va ascendiendo de forma más o menos suave, a excepción de un tramo inicial más exigente, hasta la Estación de Huesa. En febrero-marzo, el campo de almendros contiguo nos recordará por qué hacemos esta ruta. Las vistas de la torre vigía hecha a semejanza de la Torre del Oro sevillana para controlar los almacenes de esparto, con Sierra Mágina al fondo, es otro atractivo (a pesar de que algún descerebrado con iniciativa haya grabado en su superficie mensajes estúpidos con el puto spray, cuyos fabricantes y usuarios de esta calaña deberían introducir sus extremidades superiores en los orificios anales).
Continuamos de frente y, en el cruce en el que aparece el asfalto de nuevo, elegimos esta superficie en un giro a la derecha. Con tendencia predominantemente ascendente, llegamos hasta casi, casi la estación de Cabra. Cuando ya la divisamos en lontananza, concretamente en el primer carril que hay después de la señal de la fábrica de Cayetano, giramos a la izquierda. Descendemos por este carril principal hasta que el carril coincide con el paso de aguas, punto en el que giramos a la derecha por un carril secundario ascendente. Continuamos por este carril, en un sube y baja por un par de barrancos (uno profundo y el siguiente aún más) y, tras una segunda subida extenuante, alcanzamos un gran llano o paramera, frecuentemente plantado de cereal, desde el que ya se adivinan las sierras granadinas. Hay un cartel que nos indica que esta es la Cañada de los Potros. En el único cruce en que podíamos dudar, seguimos el carril más marcado, a la izquierda, obviando el que continúa más de frente hacia Sierra Nevada. Tras una bajada y subida, pasamos por una gran cortijada y encontramos nuevamente el asfalto, por llamarlo así, a la derecha. Un llaneo breve nos conduce a la "carretera" que viene de la Estación de Huelma (se ve al fondo, a la derecha) y baja, a la izquierda, hacia la carretera que une Guadahortuna con Alamedilla. Mucho ojo, la bajada es muy pronunciada y la gravilla y los baches pueden hacer que demos con los huesos en el suelo en cualquier momento.
Alcanzada la carretera bien asfaltada, lo suyo es dirigirse a Alamedilla para reponer agua, electrolitos, etcétera y volver a este punto. A nuestra derecha, a unos pocos kilómetros, se encuentra el atractivo principal de la ruta, Puente Hacho.
En su día, este fue el puente ferroviario más largo de España. Para acceder a él, podemos remontar por un empinadísimo camino que hay nada más cruzar el río o continuar unos cientos de metros hasta encontrar a nuestra izquierda la antigua carretera, mucho más amable. Al llegar a la estación, vemos los dos puentes (el que todavía conserva vías y el bonito). Pasado un primer tramo que da bastante yuyu incluso andando, la mayor parte del puente es más o menos ciclable, si bien lo exiguo de la chapa por la que se rueda, los huecos que hay entre las traviesas y la barandilla oxidada, por no hablar de la irregularidad de los maderos que sobresalen (con los que puede tropezar el pedal), harán que la experiencia, para quien quiera asumir el riesgo de caerse al vacío, resulte acongojante.
Al otro lado del puente, encontraremos un carril entre las vías y un campo de olivas que, además de dar la bienvenida al plato chico por primera vez en el día, irá templando las piernas para que sea imposible subir la segunda pared. Cuenta la leyenda que hay quien sí la ha subido sin poner el pie en el suelo ni caerse de espaldas. Superado este repecho, seguimos de frente unos doscientos metros y, en el cruce de caminos, buscamos el que sigue de frente tras unas carrascas (los otros dos cambian de dirección de forma muy evidente). Tras una zona de subida moderada, bajamos rápidamente a un arroyuelo con un vadeo muy cachondo si ha llovido bien y alcanzamos de nuevo, y definitivamente, el asfalto junto a Villacampo del Moral.
Giramos a la derecha, hacia la Estación de Huelma, y seguimos la carretera más ancha unos kilómetros. Dejamos la susodicha estación y, tras un kilómetro de ascenso, continuamos el sube y baja que nos espera en dirección a Cabra del Santo Cristo, ruta bien señalizada en todo momento. Tras atravesar Cabra, encontramos un mirador y una carreterilla descendente a la derecha que nos conducirá, en un vertiginoso y peligroso descenso (ojo, carretera muy estrecha y virada y coches acostumbrados a usarla entera) con unas vistas estupendas hasta el Arroyo Salado, donde nos espera un tortuoso final de dos kilómetros ascendentes a más del 7% de media, con lo más jugoso del asunto concentrado en el primer kilómetro.

Comments

    You can or this trail