Las Minas-Collado Buendía-Sotos del Cenajo-Sierra de Pajares-La Chamorra-Presa del Congosto de Almadenes. Anthercas

Acceso desde la salida 75 de la autovía Murcia-Albacete, a la altura de Cancarix en dirección Agramón (CM- 9320) y por la A-14 a Las Minas.

Salimos 11 miembros del grupo “Pedaleando por la Vida” desde la Calle Mayor de Las Minas (Hellín, Albacete), al puente sobre el Segura; llegamos a pedanía moratallera de Salmerón, bordeamos una casa señorial ascendiendo por carretera sin tráfico (B-22) hacia el Embalse del Cenajo, vamos paralelos a la Cañada de las Oraciones.

Seguimos rectos en el cruce al Chopillo, para tomar pista a la derecha en el Collado de los Colorados, al Cortijo del Collado Buendía; lo rodeamos para descender a la pista de acceso a la finca (vallada pero con portezuela) que nos saca bajo la presa del Cenajo, destacado por su tamaño y construido por presos tanto políticos como comunes, procedentes de las cárceles de Hellín y Las Minas, llevando a cabo las tareas más arriesgadas. En 1947 se empezó a construir un poblado obrero, con lavadero, ermita, cuartel, tiendas y casa para la administración de la obra. Terminado en 1957, fue inaugurado por Franco el 6 de junio de 1963.

Enlazamos con la pista forestal ribereña cerca de la Presa de Machuca, pedaleamos junto al río Segura pasando por los sotos del Cenajo, mientras bordeamos la Sierra de Cubillas entre cañaverales y tarajes. Tomamos el mantente en el Área recreativa de Cubillas con mesas, cubos de basura y juegos infantiles.

Pasamos junto a una vaguada de badlands rojizos con murete de contención, antes de tomar por la izquierda en la bifurcación de pistas. Remontamos sobre el encajonado valle, entramos en la zona de la piscifactoría para ver la Presa del Hondón.

La pista comienza a tomar pendiente para adentrarnos en la Sierra de Pajares, avistamos erosiones rocosas de caprichosas formas, choperas en formación, terrenos áridos de ralo matorral y el Cerro de Salmerón o del Monegrillo (492 m), cono volcánico producido hace 5 millones de años por la erupción lenta de lava viscosa (domo).

Nos reagrupamos en los cruces, iniciando el rápido y zigzagueante descenso hasta el puente de madera y chapa de la Chamorra, seguimos a la derecha en el cruce y entramos en el caserío de la Presa del Rey, me acerco a pie para plasmar este gran azud junto a las ruinas de una casa fortaleza y una acequia.

Salimos a la pista principal, un cartel informa que Anibal cruzó con sus tropas estas tierras, camino de la conquista de Roma, con 20.000 infantes, 10.000 jinetes y 90 elefantes. Cambiamos la gama cromática de marrones, rojizos y ocres por las tonalidades verdosas de frutales y arrozales.

Dejamos atrás Maeso y Las Minas para dirigirnos al túnel que nos interna junto al río Mundo por las Casas del Salto, la Central Hidroeléctrica Coto Minero y los Yesares de Hellín a la presa del Cañon de Almadenes, al otro lado del congosto se sitúa el túnel del ferrocarril Chinchilla-Cartagena.

El origen del Cañón de Almadenes se debe a una falla tectónica que corta estratos superpuestos de dolomías y calizas, junto a los conglomerados y areniscas, son rocas que se erosionan con mayor dificultad dando lugar a escarpes, resaltes, abrigos y cañones en los cursos fluviales, en este caso las aguas han ido horadando y labrando un desfiladero de casi 12 km de largo, con paredones que oscilan entre los 70 y los 120 m de altura.

La capacidad del embalse del Talave era insuficiente para regular las aportaciones totales del río Mundo, razón por la que se decidió construir el de Camarillas. No hubo dudas para fijar el emplazamiento: el congosto de Los Almadenes, entre Agramón y las Minas con cerca de 1 km de recorrido. En el proyecto de 1930 se optó por cerrar la embocadura del estrecho de Los Almadenes con una presa de fábrica para 36 Hm³ cuya altura se limitó con la condición de no inundar la vía del ferrocarril. Se paralización las obras desde 1935 a 1953 por culpa de la Guerra Civil y la incertidumbre geológica del material calizo de la cerrada. Acabaron en 1961. La pasarela de hormigón en la pared derecha, conectaba a los operarios con el pie de presa, aunque ahora está en ruinas sigue siendo espectacular.



Volvemos por la misma pista y túnel a a la pedanía rural de Las Minas, ubicada sobre una antigua zona de explotación de azufre, alcanzaron su máxima producción durante la Primera Guerra Mundial.
Desde la época romana se empleaban el azufre como medicina, alumbrado o en rituales religiosos de purificador. En la Edad Media para la elaboración de la pólvora y en los últimos años como pesticida o abono.
Este mineral determinó el origen del poblado minero y las casa-cueva, se cerró la explotación minera en 1960 debido a la falta de innovaciones tecnológicas, malas comunicaciones que encarecían el transporte, las constantes avenidas, la competencia del azufre siciliano o estadounidense y la emigración ante el paludismo, que aparecía durante los meses de verano por el calor y la aridez, propiciada además por la sobre-explotación de la madera circundante.

El cierre de las minas durante las épocas de verano, obligaba a los operarios a cultivar en los márgenes de los ríos Mundo y Segura (arroz mayormente), así acabo siendo su trabajo principal.

Rematamos comiendo en el Bar Levante, pensando en los que no han podido venir y en ir preparando la próxima.

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