Llaneo hacia Pozo Cañada, con zonas de monte bajo y visita a un Cuco. A disfrutar de la bici de montaña¡¡

Gran etapa de hermanamiento la de ayer. Nos juntamos integrantes de al menos tres grupos ciclistas, con la sola intención de dar pedales y pasarlo bien. Lo bueno de estas ocasiones es que conoces a gente y cada uno aporta algo a la ruta.
Me dejaré a alguien, pero más o menos estos fuimos los integrantes:
Por parte del grupo Pedaladas Globeras teníamos a Teo, Coro, Nino y Edu.
Edu y Coro además forman parte del nuevo grupo: 40 rutas.
Luego teníamos al grupo Patillas Rotas con ciclistas bien fuertes que compiten en la BTT, como Javi, Pedro, Gerardo, Vicente, y alguno más que me estoy dejando
Y por parte de los Pura Vida iba un servidor.
De charleta con unos y otros y disfrutando del campo y la buena temperatura se nos pasaban rápido los kilómetros y los cruces iban quedando atrás. Con Edu hablamos de compaginar el trabajo con la bici, algo esencial en mi modo de entender la vida.Con mi tocayo fuimos charlando sobre su montura de repuesto, pues la oficial la tenía en el taller, y trajo una antigua pero efectiva Trek 7000. De guiarnos se encargaba Nino y nos llevó por el cordel de Chinchilla. Nos subió por los escalones y seguimos hacia los molinos para evitar las chinchetas. En algún cruce se pedía opinión y al final tirábamos por donde se decidía alguien, al que seguíamos sin mayores problemas pues la ruta era lo de menos, y el buen ambiente y la charleta distendida reinaba en el grupo.
Seguimos por esa pista larga que tenemos tras los molinos y que nos lleva con suaves toboganes directos a la finca de Aldea Nueva. Aquí fui compartiendo esfuerzo y pedalada con Teo.
En Aldea nueva Edu nos enseñó algunos vestigios de lo que fue una calzada romana de la que apenas queda nada y de nuevo estuvimos pensando hacia donde seguir. Las opciones eran continuar hacia Casa Gualda y Munibáñez cruzando la vía del tren, o girar a la derecha buscando la autovía de Murcia. Al final nos decantamos por esta idea y nos metimos en un coto privado de caza. Sin vallas ni puertas, pero mejor evitarlo en temporada de caza, no tengamos lio.
Esta zona es divertida pues cruzamos monte bajo y el camino roto en ocasiones, nos permite sacar partido de nuestras monturas. De eso precisamente íbamos hablando con Pedro, y con Javier, comentando sobre bicis, sobre tiendas y todas esas cosas que nos gustan a los ciclistas. Llegamos a lo alto de una loma donde el camino terminaba en un bonito cuco con un par de ventanas, donde nos tiramos unas fotos.
Desde este punto veíamos una larga pista que nos llevaba rectos hasta Pozo cañada y frente a nosotros, tras un campo sembrado, veíamos una loma con monte bajo similar a la que estábamos.
Javier salió a buscar una senda de bajada, pero topó con una valla por lo que decidimos despedalear lo pedaleado hasta un camino con idea de buscar esa otra loma de monte bajo. Seguimos un camino franqueado por una valla a la izquierda y el GPS me indicaba un camino a la izquierda que se adentraba en esa loma, pero…. Nos encontramos con una valla y se terminó el monte bajo. Seguimos el camino franqueado por almendros y salimos a la vía de servicio de la autovía.
Terreno idóneo para soltar las piernas y sobre todo la lengua. Fui charlando con Koro y disfrutando de su buen humor.
A la altura de Trialsa cogemos la cañada real de Andalucía y luego regresamos a la vía de servicio para evitar el tramo del cordel de la Gineta a Chinchilla que está con arena suelta, y ya teníamos el viento en contra como para meter más pimienta a la ensalada.
Aquí nos dio por tirar y este tramo hasta el puente del parador se hizo a 30km/h y con el viento en contra. De vez en cuando hay que apretar y que las piernas chillen.
Nos quedaba entrar a Albacete y dirigirnos al bar el estadio donde ponen buenos cubos de quintos bien fríos y mejores tapas para acompañar.
Koro nos hizo de anfitrión y se preocupó de que no nos faltase hidratación a ninguno del grupo, e incluso se nos unieron Marcial y Francho con su nueva flaca MMR por lo que terminamos la velada en buen compañía, charlando de lo que nos gusta y compartiendo unas cervezas… ¿Qué más se puede pedir?
!!A disfrutar¡¡