Los 100 de la Nava 2019

Marcha a la que nos apuntamos ya por costumbre. Este año tardaron bastante más en agotarse las inscripciones por la Vuelta BTT a Segovia, restando muchos pros a la marcha; pero como se suspendió hubo reengancho al final.

Nos dimos cita 22 Sexmeros, uno menos que los de Vintoro Bike que se llevaron el jamón al Club más numeroso.

Por mucho que se dijo de quedar todos antes para foto familiar, por mucho que uno madruga un poco más y por mucho que uno se peine un poco más…allí aparecemos los de siempre y en el lugar de siempre. Hubo foto, como de costumbre en la línea de salida.
Mañana fresca (7ºC) que avecinaba un día no muy caluroso. Mejor así. Para no pegarnos la paliza hasta el río y evitar a los que ya van delante y en la primera cuesta se bajan de la bici y taponan el camino, haciendo que te bajes también de la bici; nos pusimos lo más adelante que pudimos en la salida. Aunque salimos a buen ritmo, es igual, ves cantidad de ciclistas que van como si se acabaran las birras. Aun así, no hubo parones en las subidas del río y llegamos a Navas de Oro con la sensación de ir más adelantados que otros años y bien agrupaditos ya los compis de iríamos hasta el final toda la marcha: Fonsi, Wandar, Andrés y er Jarri.
A partir de esta localidad, normalmente coincides con otros ciclistas el resto de la marcha, un poco más adelante o un poco más atrás. También es habitual formaciones de grupetas por nivel físico.

Íbamos de lujo los cuatro jamelgos. Paramos brevemente en el avituallamiento del km 30, pasamos el corte antes de las 11:00, pero el km 47, al bajar por la Ermita de Fuentes, un trozo de pizarra hizo un agujero en la cubierta trasera de mi bici y me dio guerra el resto de la marcha (60 kms ni más ni menos!!). Idiota de mí por no rellenar el líquido del tubeless que me hubiera solucionado todos esos palizones de inflar la rueda cada pocos kms, porque aunque metimos una mecha, no terminaba de sellar. Varios kms más adelante le puse una cámara que de poco sirvió porque se pinchó en otros tantos kms.
Pero ahí estuvieron Wandar, Fonsi, Andresín y varios solidarios anónimos que me dejaron su bomba para ir inflando la rueda (se nos acabaron todas las bombonas de CO2).
Las cuestas, entre la pendiente, la arena y la presión baja de la rueda se me hacían duras de cojones. Este año he entrenado pero bien en esta marcha.
Cada vez que paraba para inflar la rueda nos pasaban unos cuantos. Nos dimos cuenta así de que este año íbamos bastante adelantados respecto a otros años.

En el avituallamiento de la Ermita del Tormejón paramos a papear pero bien, rellenar botes y a seguir. Tocó una parte nueva y dura, coronando el cerro justo en frente. Y lo mismo llegando a Pinilla Ambroz, donde tuvimos que perder la altura ganada para volver a ganarla hasta las antenas en otro tramo nuevo.
Después de subir el cerro que llamo yo “el camello” de Pinilla Ambroz, tuve que parar de nuevo a hinchar la rueda. Poco más adelante, en el último avituallamiento oootra vez, aunque mejor y con menos esfuerzo debido a la bomba de pie de Luis el de “labicimaja”. Pude subir los Petroglifos de Domingo García pero en cuanto iba bajando tuve que parar de nuevo.
Pasado Domingo García, los hermanos Pascual nos llevaron a buen ritmo hasta la vía verde, donde tuvimos que parar otro par de veces a inflar la rueda.
Pero finalmente cruzamos la línea de meta a las 3 menos 10 con tiempo de 5h 24 minutos. De no haber sido por mi fallo de no rellenar el líquido, hubiera sido otra cosa bien distinta, pero chico…entre la temperatura del agua de la ducha, la paellita y las birras de después…se nos olvidaron toditas las penas!!

Marcha recomendada, muy bien organizada y con 3 recorridos a elegir. Buenos avituallamientos, paellita rica con birras al llegar y cantidad de regalos en el sorteo. Les tocó a Omar, al Zorro y al Greñas que, como no estuvo, no se lo dieron.