Memaia enduro integral

La ruta de hoy puede considerarse una versión mejorada de la realizada allá por abril (https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/memaia-enduro-69408699), en la que dábamos cuenta de 3 buenísimas bajadas en las faldas del monte Memaia. Tres son las principales diferencias entre la ruta de entonces y la de hoy: primero, aquí vamos directos al turrón desde Elorrio, sin visitas culturales a Betsaide ni nada parecido. Segundo, añadimos una cuarta bajada, aparentemente nueva, llamada Errekazabaleta en Strava. Y tercero, innovamos en el remonte, optimizando el desnivel a costa de comernos cinco minutitos de empujabike en cada uno de los remontes (excepto en el primero). En mi opinión, todas ellas hacen que si ya cataste la ruta de abril, merezca la pena darle otra visita.

Dejamos el coche en un polígono industrial a los pies del primer remonte (Betsaide bidea) nada más salir de la autopista, imposible un sitio más conveniente. La primera subida, como digo, la hacemos por Betsaide bidea, una pista ancha un pelín aburrida y con una fuente a media subida (hoy seca). Tiene algún repechón más hermoso, pero vamos frescos y subimos bien. En la parte superior, nos desviamos por un precioso sendero y no subimos hasta el buzón de Memaia como en abril, sino que nos quedamos en una cota un poco más baja en el mismo cordal, pero con las mismas vistas del macizo del Anboto, de quitar el hipo. Inmejorable sitio para parar a ponerse protes disfrutando de la estampa.

De nuevo en marcha, seguiremos la cresta con algún pequeño repecho hasta enlazar la bajada de verdad, curveo rápido por pinar donde dejaremos a mano derecha el inicio de la segunda bajada y seguiremos hasta un desvío muy claro donde comienza Otalorea y donde si seguimos recto nos metemos en la bajada a la depuradora. Como ya comenté en abril, es un sendero que va de menos a más, con una primera parte con poca pendiente donde mover la bici y "lucirnos" un poco, y tras un cruce de pistas, una segunda donde ya tendremos que ir con un poco más de atención porque tras un salto y un par de wallrides tendremos que superar un par de horquillas verticales en las que meter la bici con decisión. Para finalizar, un pequeño salto antes de llegar al punto donde acaban las tres primeras bajadas del día.

Como digo, la novedad viene en este remonte. En abril perdíamos unos 60m de cota por asfalto para repetir el remonte por Betsaide bidea, pero ahora ascenderemos por un senderillo a mano derecha que se va estrechando y empinando hasta convertirse en un auténtico desafío para los ebikers más habilidosos y una quimera para los musculares. Hoy, 5 de septiembre con 30ºC y sin haber llovido en una semana, está con las piedras resbaladizas que imposibilitan la tracción hasta de las zapas, por lo que en febrero tiene que ser una fiesta. En cualquier caso, son apenas 5' de empujabike hasta unirnos con el sendero de bajada de Errekazabaleta y volverse ya ciclable. Tras unos metros compartidos, la bajada tira para abajo (oh sorpresa!) y el remonte sigue recto hasta el cruce de pistas que hemos atravesado con Otalorea. Esta vez seguiremos recto para tomar una pista de grijo que nos va a subir de forma bastante descansada hasta el cordal de Memaia de nuevo. Buena alternativa al remonte de abril.

En la cresta, mismas vistas del Anboto, unos dátiles, protes y para abajo, siguiendo el mismo sendero que antes. La entrada directa a Errekazabaleta desde el sendero no la llegamos a encontrar, por lo que damos un pequeño rodeo hasta llegar a una pista que es cruzada por el sendero donde podemos comprobar que la bajada viene de un poco más arriba. Como son solo unos metros, no nos metemos a buscar el inicio exacto del trail y nos lanzamos para abajo. Esta bajada tiene pinta de ser nueva, algunas zonas del terreno están todavía tiernas, como si las acabasen de palear. A pesar de ello, es una bajada divertida a través de pinar que va de menos a más, del estilo de la anterior. Empieza suave, con curveo con flow y poca pendiente, pero en la última parte la pendiente aumenta considerablemente y hay que hilar fino para meter la bici. Encontraremos también algún pequeño salto por el camino antes de llegar al mismo punto desde donde volveremos a remontar.

Nuevo tramito de empujabike y el remonte anterior, pero esta vez nos desviamos antes de llegar a la cresta a mano derecha para tomar el inicio de Amurdi, la tercera bajada del día que arranca de verdad una cota algo inferior que sus hermanas, consiguiendo así una nueva optimización de los metros subidos. Amurdi es, para mi, la más divertida, trabajada y completa bajada de las cuatro que haremos hoy. Más saltos, más peraltes, más diversión. Todos los saltos son asequibles, aunque no está de más asomarse antes para evitar sorpresas desagradables. Lo dicho, buenísima bajada.

Nuevo remonte, empujabike, pista y sendero hasta la cresta, donde nos despediremos del Anboto por hoy. Seguimos el sendero de la cresta que ya nos sabemos de memoria, soltando cada vez un poco más los frenos, y dejamos atrás los desvíos de Errekazabaleta y Otalorea para seguir floweando por el pinar en la cuarta y última bajada del día, que baja desde Memaia hasta la depuradora de Elorrio. Esta primera parte está muy bien, pendiente amable y curveo con flow, rápida. Luego la cosa se empina y empiezan a aparecer aquí y allá roderas de moto que ensucian un poco la bajada. Viniendo de las 3 bajadas que venimos, a cualquiera le parece que esta bajada está hecha una puta mierda, pero si comparamos con el pan nuestro de cada día (Tojo, Argalario y demás montes donde los moteros campana sus anchas), pues qué quieres que te diga, tiene 2 o 3 puntos de roderas sin fondo donde hay que echar pie a tierra momentáneamente, pero es una bajada que objetivamente y en su conjunto está de puta madre. Tuvimos dudas de si darle o repetir una de las otras como cuarta bajada, y sinceramente creo que acertamos haciéndola. Definitivamente, merece la pena, al menos en condiciones secas.

Caemos a las sempiternas obras del TAV donde perdemos los últimos metros de altura por pistas (da rabia!) antes de llegar a la vía verde que nos devolverá con una sonrisa en la cara al coche tras una mañana perfecta de enduro! En cuanto a su dificultad técnica, tratando de ser objetivo diría que dificil. Yo ya me he habituado peligrosamente a los tramos verticales, pero pensándolo bien, no son para todo el mundo. Es cierto que no son demasiados, pero casi todas las bajadas tienen su "aquel".