Camino del Cid - decimoprimera etapa, Molina de Aragón - Orihuela del Tremedal

A las seis de la mañana mi compañero y yo ya andábamos buscando donde poder desayunar, encontramos una cafetería abierta y después del desayuno emprendimos aventura hacia Orihuela del Tremedal.
Empezamos ya la salida subiendo cuesta, pero es lo que tocaba, así que al rato de subir la cuesta a la derecha tomamos un camino que nos llevo a Terraza luego pasamos por las afueras de Ventosa, el paisaje era espectacular a esas horas, pues los rayos del sol daba magia a los tonos de la naturaleza, tal es así y tan absortos en lo espectacular de las vistas que sin darnos cuenta tanto mi amigo como yo, nos despistamos y tomamos camino equivocado, luego hubo que deshacer ese trayecto, pero esa perdida de tiempo para mí, mereció la pena por ese disfrute de la naturaleza, ya de nuevo en el camino correcto seguimos disfrutando del paisaje, cruzamos una aldea llamada Teroleja, para no volver a equivocarnos decidimos seguir por la carretera, cosa que nos peno, pues no pasamos por Chequilla, que era un lugar previsto para hacer una parada y disfrutar de sus entornos con sus piedras, para otra vez será.
Seguimos pedaleando y no paramos en ningún pueblo porque por ninguno cruzaba la carretera, a la altura de Checa nos desviamos para tomarnos un descanso y reponer fuerzas, nos tomamos unos torreznos y un par de cervecitas y seguimos camino hasta llegar a Orea lo cruzamos y seguimos para llegar pronto a Orihuela del Tremedal, pues ya se nos estaba haciendo larga la etapa.
Cual seria nuestra sorpresa que donde teníamos hecha la reserva para comer, dormir y desayunar, estaba cerrado, nos dijeron que ahí era imposible dormir porque no abrían hasta el día quince, le dije a la señorita que quería hablar con el encargado porque había un error y no era nuestro, así que vino un señor y nos dijo que era imposible que tuviésemos reserva alguna, ya que hasta el quince no se habría, me dirigí a las alforjas tomo un sobre con las reservas realizadas en el mes de febrero y que les imprimí y se la enseñe, el hombre se quedo extrañado, me pidió que le dejase la hoja y se fue hacia las oficinas, al momento vino y nos pidió disculpas, ellos cometieron el error de no avisarme con tiempo para hacerme saber que, se anulaban las reservas, pero a mi no me llego la notificación, así que nos proporcionaron otro alojamiento en otro lugar en el pueblo, así que media vuelta y buscar ese lugar, una vez encontrado, ducha comer y siesta.