Monasterio-Veguillas-Robredarcas-Fraguas (Guadalajara, España)

Comenzé la ruta en Monasterio, subiendo por una callejuela para bajar al río y subir por un camino ancho, arriba me dí cuenta que se me olvidó el agua y tuve que volver, desde allí subí arriba, más adelante me desvié para ver el karst de yesos y continué hasta Veguillas, rodeando el pueblo por el camino de abajo y llegando a la carretera, donde a fin de evitar los coches e ir más cómodo opté por ir por la antigua carretera paralela a la pricipal los tramos que pude, más adelante tomé otra vez la carretera antigua por donde llegué a una antigua casa forestal que estaba abierta, aproveché para curiosear pues las oras veces estaba cerrada, estaba en buen estado incluso tenía algún saneamiento, chimenea y conservaba aún las ventanas, al llegar de nuevo a la carretera me desvié por camino a la izquierda paralelo al río subiendo por suave pendiente y fijándome a la derecha a ver si veía una pequeña laguna que la otra vez no ví pero esta vez logré verla entre el bosque, subí a Robredarcas donde solo queda la antigua iglesia en ruinas, seguí subiendo por subida cómoda cuando me adelantó un todoterreno de los forestales con un forestal con cara de mala uva, ya veréis por qué, el sendero es todo por bosque hasta llegar a Santotis desde donde subí a Sierra Gorda y a ver si estaba Yolanda en la caseta forestal pero estaba cerrada, me sorprendió no ver a los forestales allí, bajé hacia Fraguas pero al llegar abajo torcí a la izquierda para ir por otro camino pero me encontré con una cinta blanca que prohibía el paso a vehículos puesta por los agentes forestales que ví antes, hacer fuego y acampar, al llegar a Fraguas había mogollón de gente pues era la fiesta del aniversario, por lo visto los forestales prohibió a la gente ir en coche no obstante contínuamente llegaban desde Jocar y desde Monasterio andando 4-5 kilómetros, contaron unas 80 personas, todos tomando cerveza artesana y carne guisada con patatas, allí estuve unas cuantas horas pasándomelo realmente en grande y luego bajé a Monasterio cruzándome con alguna gente más. También ví una sima, si algún espeleólogo está interesado le puedo pasar el waypoint por email.
Los forestales y la guardia civil trataron infructuosamente por todos los medios detener la fiesta y sin embargo la animaron más, incluso llegaron a ir de casa en casa por Monasterio diciendo mil mentiras y amenazando para que no les ayuden, en un claro acto de acoso ilegal, injustificado y de abuso de autoridad toda vez que la gente que allí había no hacían ningún delito.