Montefrío - Cruz del Calvario

Una rutilla "a la medida" del Presi. Eso decía el inefable Quico. Y vaya si lo ha sido.

En una mañana espléndida, fría y soleada de Enero nos dispusimos a llegar al bello Montefrío siguiendo esta vez un trazado mas llevadero, con suelo firme y pendientes no muy fuertes.

Desde Villanueva Mesía, por la carretera de Huétor Tájar, tomamos el carril que sale a la izquierda nada más pasar el puente de Milanos, para luego por el carril que cruza la vega llegar al Cárcamo y a la Fábrica.

Seguimos la carretera que con el arroyo a nuestra derecha sube hasta el cruce de Algarinejo-Montefrío, parando en un par de ocasiones para deleitarnos con las remontadas de patos que salen despavoridos desde el arroyo y luego, a la altura del desvío de Monte Santo, quedarnos boquiabiertos contemplando una familia de cabras monteses, con gran macho incluido. ¡Lo nunca visto por estos parajes!

Continuamos la ruta llegando al puente romano de Montefrío y luego subir por la carretera que pasando por el desfiladero nos pone a la altura del mirador de la Hiponova, sitio fabuloso para contemplar la magnífica estampa de Montefrío enmarcado en un cielo azul con nubes aborregadas que le ponen un punto de gran atractivo.

Después de tomar un ligero refrigrio y un buen trago de agua tomamos el carril de la Hiponova, que deja la carretera y en continuo ascenso nos lleva primero hasta el Badén y luego hasta el cruce de la Cruz del Hachuelo. Continuamos pasando por el inexplicable basurero y superamos las pronunciadas rampas del Hachuelo, cruce del Pregonero y bordeamos el Cerrajón, para hacer una breve parada para el recuerdo en la Cruz del Calvario.

Las panorámicas de Sierra Nevada como telón de fondo nos llenan de satisfación y nos hace sentirnos pájaros que desde la altura contemplan el paisaje.

El descenso rápido y vertiginoso dejando la Ventilla de Serón, Campohumano y en un instante en el cruce de Escalona, para llegar hasta el cortijo de Tajarilla, lugar especial que nos permite contemplar bellas imágenes de la Vega de Huétor y del barranco de Valcázar.

Pronto llegamos al cruce de Caballerías y a la carretera de Huétor que nos trae de vuelta a Villanueva Mesía.

Desde aquí, "El Presi" quiere dar las gracias a tan grandiosos colegas de pedaleo por su generosidad y sacrificio al querer acompañarlo en esta etapa que ahora emprende de recuperación de su rodilla. Un abrazote.