Montequinto - Isla Mínima - Montequinto

Ruta fácil, para pedalear, yo he hecho el mismo camino de ida que de vuelta, aunque hay más opciones. Ya hay abierto un paso por debajo de la SE40 en la orilla derecha, hace unos merses vi las obras y ya se puede pasar desde hace algún tiempo. Pistas entre naranjos hasta Coria y después entre arrozales, pare no había nada plantado y el aspecto del pasiaje era de tierra de secano total. La primera parte la hice a buen ritmo, pero cuando llegué a Isla Mínima el sol ya pegaba de lo lindo. Al famoso embarcader no se puede accrder, está cortado por verja. El sitio no tiene nada de especial solo que de vez en cuando pasan grandes barcos y es impresionantes verlos tan cerca. El camino de vuelta el sol fué apretando más y más, una autentica paliza de rayos uva, beta, ganma y su puta madre. Notaba que las fuerzas me faltaban. En una paradita para mear me dio por mirar la temperatura que marcaba el cuenta kilómetros, 35 grados, y ni una puta sombra. Ya en la carretera de Coria antes de coger el canal, otra vez, me encontré en una sombra a Viriato, nombre curioso e histórico que es tradición en su familia. Ese último trayecto lo hicimos juntos, yo me desvié para Bellavista y él siguió hacia el Lagou, espero que llegase bien a su casa.

Pienso que no merece la pena ir hasta Isla Mínima, no sé si la cosa cambiara cuando los arrozales estén inundados de agua y se pueda acceder al embarcadero. Allí había máquinas haciendo obras y me pareció ver una pasarela de madera que bajaba en dirección a dicho embarcadero. También vi en la carretera un cartel que indicaba la difrección de Isla Mínima, antes del la venta del cruce.

En mi casa me repuse a base de cerveza y cerveza y una buena ducha de agua fría para bajar la temperatura del cuerpo, si me hubieran puesto un huevo en la cabeza creo que se habría frito.

Más pedales y menos tocino.