Mora la Nova i Mora d'Ebre - Miravet - Pinell de Brai - Via verda - Xerta - Tortosa - L'Aldea

Inicio en la estación de tren de Mora la Nova hasta la orilla del Ebro para disfrutar del amanecer en el río. Cruce por el puente viejo a Mora d'Ebre y paseo por sus calles hasta el embarcadero. Diversos carteles nos muestran los escenarios de la dura contienda para cruzar el río durante los días clave de la guerra civil.

Por camino rural llegamos a Benissanet, destaca el refugio antiaéreo al que se accede por una bella fuente. Seguimos por carretera ante la falta de camino entrelazado hasta Miravet.

Alcanzamos uno de los pueblos más pintorescos del sur de Cataluña, para admirar el pueblo la mejor localización es el embarcadero donde se funden el río y el pueblo como pintado sobre las rocas de un acantilado que culmina con el imponente castillo en lo más alto.

Rodamos por las estrechas y empinadas calles, desayuno junto al río y subida por carretera con pendientes del 10% hasta el castillo templario, escenario de momentos históricos desde los musulmanes hasta la batalla del Ebro. Entrada al recinto (5€ y seguridad para aparcar la bici) para admirar las ruinas y las vistas del río y el paisaje.

Por la carretera T-324 rodamos hacia el oeste en cómoda ascensión hasta el cartel que da la bienvenida a la comarca de La Terra Alta, se nos abre una fantástica panorámica de la Serra de Pàndols - Cavalls, punto estratégico de la defensa republicana durante la batalla del Ebro para contener el avance de las tropas franquistas. En sus míticas cotas se conservan restos de trincheras y monolitos de homenaje a los caídos.

Llegamos al Pinell de Brai, recorremos sus empinadas calles y admiramos las casas colgantes. Seguimos por carretera N-230 en dirección Prat del Compte con bonito descenso hasta localizar desvío para acceder a la Ruta Verda.

Empieza un periplo divertidísimo por el antiguo trazado del tren entre Aragón y Tortosa, el tramo hasta Xerta es brutal tanto por el paisaje montañoso de los Ports como por el desfiladero del río de la canalera y especialmente por el recorrido que combina túneles y puentes.

Una obra faraónica iniciada en el siglo XIX por iniciativa privada, avanzada durante la dictadura de Primo de Ribera y culminada por Franco en sus tramos más complejos por prisioneros durante la Guerra civil para movilizar tropas y armamento a lo largo del frente del Ebro.

Los momentos más emocionantes son los túneles de largo recorrido cuando a pocos metros de entrar quedas completamente a oscuras y no se divisa el final, en teoría están iluminados (una luz mínima y muy tenue) pero la realidad es caprichosa, se encienden al entrar en el túnel pero en ocasiones se apagan a medio camino o simplemente no hay iluminación por lo que es vital disponer de linterna de cierto nivel porque con el móvil es insuficiente y es muy fácil perder la orientación.

A la altura de Xerta se acaban los túneles y el trazado sigue su leve descenso hacia Tortosa junto a la carretera y al Ebro con un paisaje dominado por los naranjos.

Abandonamos la vía verda a la entrada de Jesús, comida muy especial en el Bar Restaurante Sant Francesc y entrada a Tortosa para buscar el puente junto a la estatua franquista en medio del Ebro. Recorrido por el barrio histórico y ascenso hasta las murallas y castillo de la Suda, el tamaño y localización estratégica de la fortaleza indican el enorme poder de la ciudad de Tortosa a lo largo de los siglos. Indispensables las panorámicas desde sus baluartes.

Salida de la ciudad por la vía verda hacia el Delta del Ebro y atajo por la vía de servicio de la comarcal para llegar L'Aldea y terminar la ruta en la estación de tren.

Muchas emociones en esta ruta tan singular plagada de momentos vibrantes entre la exuberante naturaleza y los escenarios de la historia de nuestro país desde la era de dominación musulmana hasta el alzamiento del último dictador