Noez-Totanés-Gálvez-Castillo de Montalbán-Santa María de Melque-Noez

Bueno, pues esta vez sí, pudimos hacer la ruta nocturna del Castillo de Montalbán y La Iglesia de Santa María de Melque, que tenía ya ganas de hacerla. Ya la hicimos en su día diurna, y ahora con los calores, pues queríamos probarla nocturna. Quedé sobre las siete con mi compañero humito, para salir de Noez y poder llegar al atardecer al Castillo de Montalbán. La primera parte es muy fácil, casi todo bajada, salimos por la carretera de Noez a Totanés, de ahí hasta Gálvez ya por camino, hasta llegar a San Martín de Montalbán. Desde Gálvez hasta San Martín hay varias alternativas, pero son todas similares en distancia y dificultad. Ahora, hasta el desvío al castillo, es un tramo por carretera pero que no suele tener mucho tráfico. Nos desviamos en el cruce que está indicado, hacia el castillo, creo que el único día que se puede visitar son los sábados, pero bueno, a las horas que eran no creo que hubiese nadie para decirnos algo, y si nos hubiésemos encontrado a alguien, pues siempre queda el viejo truco de "nos hemos perdido, nos puede indicar como salir?". Cuando llevas un rato por el camino, de repente gira y aparece el castillo con toda su majestuosidad. Mira que ya lo he visitado veces, pero me sigue impresionando verlo aparecer, es enorme. Además llegamos justo atardeciendo, una maravilla, sobre todo por el cortado que hace el río Torcón, por la parte de atrás, con unas vistas impresionantes, y que hace el Castillo fuese en su momento prácticamente infranqueable. Bueno después de las fotos de rigor, nos ponemos otra vez en marcha hacia la Iglesia de Santa María de Melque, no se tarda mucho, es cruzar la carretera y avanzar por un camino asfaltado. Llegamos ya de noche y estaba totalmente iluminada. Yo la había visto de día y es preciosa, pero de noche con la iluminación que tiene es, simplemente espectacular. No pudimos verla por dentro lógicamente, porque a esas horas estaba cerrada, pero solo por verla de noche por fuera, merece la pena. Aún así, recomiendo también ir a verla de día por dentro, porque es una maravilla. Bueno pues solo queda la vuelta, lo más tedioso ya que es casi todo subida, pero por caminos sencillos. El último tramo de Totanés a Noez, lo hicimos por camino para no meternos por la carretera de noche, aunque llevábamos buenas luces, no quisimos arriesgarnos. Es un poco más durillo pero más seguro. Una pasada de ruta tanto diurna como nocturna, muy recomendable de las dos maneras.