Parcial Foramontanos 2015 (2/2)

En esta ruta quería hacer la parte que me dejé hace 3 años cuando hice parte del track de la marcha Desafío Foramontanos del año 2015 (https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/parcial-foramontanos-2015-1-2-14396564), año desde el cual, que yo sepa, no se ha repetido la marcha... al menos no he localizado el track. La verdad es no sé por qué esperaba más del track, tenía esperanza de que las dos bajadas fuesen por sendero y es algo que, al menos a día de hoy, es imposible de hacer. Para colmo, a pesar de estar en pleno agosto tengo la nube toda la mañana encima y me llueve de forma intermitente, por lo que llego empapado, congelado y hasta arriba de barro.

La primera subida y posterior descenso a Viaña ya los conocía de otra ruta por la zona (https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/faldas-de-matamiguela-valle-del-barcenillas-y-goyo-park-18924061), y la única novedad que encuentro es que hay un tramo vallado en la subida por el que no se puede pasar. Unos metros más adelante se puede retomar el track empujando un poco la bici, nada insalvable. La bajada a Viaña es lo más técnico del día con diferencia: un sendero con grandes rocas y un pelín cerrado que, mojado como está hoy, se vuelve delicado.

Para salir de Luaña hay que tirar de riñones, con unos buenos rampones de cemento en los que apretar los dientes. Luego se hace más tendida la subida hasta llegar a la divisoria de aguas, donde comienzo el descenso hacia Correpoco. Aquí me llevo la mayor decepción del día, al encontrarme una aburrida pista de bajada cuando esperaba algo más divertido. En Correpoco me sale un animoso mastín a saludar al que sujetan enseguida, pero no me quita nadie mis 15-20" de tensión y gritos con la bici en la mano a modo de escudo. Para colmo, en el km 20 aprox me encuentro que el track se mete por un terreno privado que, tras la experiencia con el perro de pocos minutos antes, decido con buen criterio no seguir. Como resultado, el resto de bajada por carretera hasta Terán.

La subida al Negreo es dura, sobre todo la primera mitad, luego ya se suaviza un poco y corono de nuevo bajo la lluvia. Para la bajada, inicialmente se baja por un sendero tímidamente marcado en la hierba y demasiado recto, para conectar luego por pistas. En la segunda parte de la bajada, me temo que me va a pasar como hace 2 años, cuando no fui capaz de encontrar el sendero de bajada por estar todo cerradísimo. Y efectivamente, hay tramos en los que se puede seguir el track, a costa de llevarse tatuados los brazos, pero hay otros donde es una locura meterse. Y es una pena, porque en 2016 disfruté muchísimo de esa bajada.

Inicialmente tenía la idea de hacer el GoyoPark como colofón, pero se me ha hecho tarde por el tiempo que he perdido buscando el track y las paradas para poner/quitar ropa, y además estoy empapado, así que me vuelvo ya para el coche.

En definitiva, ruta demasiado pistera para mi gusto, en la que si encima no eliges bien el día para hacerla, acabas frustrado como acabé yo. Técnicamente moderada, solo la bajada a Viaña y el principio del Negreo tienen cierta dificultad.