Parque Natural del Gorbea, cima y rodeo completo.

22 de Abril de 2017

Espectacular ruta por tierras alavesas en todos sus sentidos; belleza, dureza, complejidad...
Cierto es que no llegaba en las mejores condiciones, por circunstancias ajenas, pero aún en buena forma, me parece que es una ruta dura de verdad,...o por lo menos en mi caso, así se me ha hecho.

Bueno, pues fijada la fecha a corto plazo esta vez, llegó el día señalado. Nos juntamos en los aparcamientos de la "casa del parque", pasado Sarria. Allí aparecemos Fran, Juan y yo, para acometer esta ruta en pleno corazón del Parque Natural del Gorbea.

El objetivo, sin lugar a dudas, es claro: coronar el Monte Gorbea (1.482 mts).
En rasgos generales la ascensión es dura, pero se iba a quedar en poca cosa, comparada con lo que la jornada de bike nos iba a deparar....

Así que dejamos atrás el parking y la zona de esparcimiento, para tomar la carretera dirección Sarria, que rápidamente abandonamos por nuestra izquierda pasando un pequeño puente sobre el río. A partir de este momento todo pista y camino forestal.

Comenzamos a ganar altura superando algún repecho exigente que nos lleva hasta una portilla y un panel que nos anuncia "Parque natural de Gorbea".
Seguimos ascendiendo y superando pequeños muros, cortos, pero de pendiente moderada. Vamos atravesando zona de bosque, hasta llegar a una zona más cómoda. La pista aquí es más llevadera. Llegamos a unas impresionantes praderas, que atravesamos en busca de una nueva pista, por la que avanzamos sin mucho esfuerzo, hasta que llegamos a una bifurcación.

Aquí la cosa cambia drásticamente; aproximadamente nos quedarán algo más de 5 kms, de subida dura, con terreno muy irregular, zonas de piedra, roca, roderas, y repechos que exigen tirar de riñones a base de bien. Superada una zona boscosa, divisamos allí en lo alto la torre que remata la cima del Gorbea. Esta allí a lo lejos, muy lejos aún, y con un tramo final que desde nuestra posición ya se adivina complicado.

Vamos tranquilos, negociando la subida cada uno a nuestro ritmo. A medida que nos acercamos nos vamos encontrando senderistas que suben de diversos puntos y vertientes de este impresionante monte. Nos vamos dando cuenta que el último muro va a ser infranqueable, sobre todo si vamos de frente contra el abandonando el track, por falta de atención más que otra cosa. Es lo que tiene, tener el objetivo frente a nosotros a escasos metros. Tras descabalgar en tres o cuatro ocasiones, eso sí, muy pocos metros,...retomamos el track para culminar los últimos metros por la zona de hierba y la cima pelada, del Gorbea, donde las ruedas se pegan como un velcro. Y por fin allí estamos, arriba del todo.
La verdad que es una montaña mítica en Alava; si a esto le sumamos que es sábado, y una climatología favorable, hacen que la cima parezca la calle Laurel. Solo falta el bar, y la terraza. Gente para aburrir. Aún con todo somos los únicos que estamos allí con nuestras monturas, pero no los primeros del día, ya que nos hemos cruzado con media docena que ya bajaban. Fotos de rigor,...unas 50 más para el book, bocatas para reponer y buen rato.

Tras el descanso, empezamos el descenso. Deberíamos bajar por el camino de ascenso, hasta la bifurcación de pistas...pero no..
Aquí llega la emplumada del día. Al señor Juan, "marqués de las barranqueras", se le ocurre la gran idea de bajar por una senda por la que vemos llegar senderistas y que intuimos se acabará juntando al track que llevamos en el gps. Yo soy de los que en el momento que oigo senda, ya me estoy lanzando, y Fran tampoco puso muchos peros,...así que en rápido consenso y tras comprobar el enlace en el gps, aceptamos el reto. Joder,..en que hora!.

Una senda fácl y disfrutona, da paso a una torrentera, estrecha, llena de escalones, pedruscos, matojos y todo tipo de trampas, muy poco o nada ciclable en gran parte de su recorrido, que al final me lleva a rodar por encima de los brezos, tipo sapo, sin mayores consecuencias que el descojono del personal. No te preocupes, me dicen, que está todo grabado!

Pasamos junto a una fuente, con un agua fresca de lujo. Algo bueno tenía que tener la bajada. Bueno, esto, y unos paisajes preciosos entre hayas. Zonas no ciclables en su totalidad, por su inclinación, raíces, y torrentes llenos de cantos rodados de variados tamaños, pero de gran belleza y tranquilidad.
A medida que perdemos altura nos vamos montando más en las bicis, aunque la piedra es una característica muy común en todo el recorrido. Nos hemos pegado buenos tramos porteando en esta bajada, lo cual se traduce también en mucho tiempo de ruta, aunque nosotros prisa, lo que es prisa, como que poca!. Finalmente enlazamos con el track que llevamos grabado, a la altura del embalse de Urteguía, y para adelante.

Avanzamos en continuos subebajas atravesando zonas de bosque, hasta que la cuesta arriba toma ventaja. Son subidas relativamente cómodas por pista. Tras una bajada por un precioso hayedo, donde perdemos bastante altitud, llegamos a otra subida más importante. El terreno muy pedregoso, con tramos parcheados a base de piedra que hacen que haya que emplearse a fondo. Atravesamos un precioso bosque muy cerrado en el que apenas entra la luz, que contrasta con un suelo de piedra blanquecina. Para mi uno de los tramos espectaculares de la ruta, que me obligan incluso a quitarme las gafas, debido a la oscuridad. Tras unos kms de subida llegamos a otra zona de grandes praderas, donde hay que estar atentos para no perder el track. En el horizonte observamos una fuerte subida, que intuimos nos va a tocar sufrir.

Otra vez descenso y posterior subida suave, pasando junto a un mirador, hasta enlazar con zona asfaltada. Esta carretera siempre tira para arriba, pero no es dura, así que poco a poco vamos ascendiendo. Llegamos a una zona de parking y ocio, donde encontramos otra fuente para reponer líquido.

Y cuando ya parece que nos librábamos de lo que antes habíamos oteado,...nos lo vamos a encontrar de pleno; subida durisima, con un sol pegando de pleno, con un terreno de piedra suelta en muchos tramos, y que nos va a hacer sufrir a base de bien.
Alcanzamos la parte más alta en las campas de Arraba, y cuando ya parece haber acabado,....pues no,.. Todavía hay más!!!
Aun nos queda superar una zona de hierba campo a traves, de esas que calientan las piernas pero bien. Enlazamos con el Gr 8, y porteamos las bicis un pequeño trecho por una escarpada ladera, bajo los picos Artalarra y Gatzarrieta. Las vistas recompensan esta dura subida de en torno a 6
kms.

Otra vez hacia abajo, pasando junto a un pequeño caserío y otra fresca fuente en la que parar a repostar. Voy pensando que no puede quedar mucho,...pero...
Cuando ya el cansancio se acumula en el cuerpo, nos queda otro "regalito" de unos 2 kms de subida, de nuevo para retorcerse sobre la bici, y que cada uno negociamos como podemos. Arriba la parada es obligada, y nueva tanda de bocadillos para acabar con todo. Estamos en un collado de montaña junto al pico Ipergorta.

Tras el parón la ansiada bajada es malísima; pista ancha llena de piedras, grava y canales de desagüe hechos en piedra. No te puedes enchufar y más que mala, resulta peligrosa.
Aún nos queda remontar por un sendero a media ladera frente al imponente pico Oderiaga (1.238 mts).
Senda incómoda, moderadamente técnica, con mucha piedra.

Tras un marcado giro de 90 grados, comienza, ahora si, una bajada campo a través por una ladera tapizada de hierba, muy limpia y muy para gozar. Llegamos hasta un monolito que ya nos indica un entorno más civilizado. Un último repecho, nos separa del descenso y posterior llaneo hasta el punto de donde partimos hace algo más de diez horas.

Impresionante ruta por unos parajes para gozar. Aún con la bajada alternativa que hemos hecho, la volvería a repetir por este camino, porque las vistas y los lugares, compensan.
También decir, que la ruta no es tontería, y además de ser larga, si no estás en plena forma, te va a tocar sufrir de lo lindo (como me ha pasado a mi).
Es también muy exigente por el terreno, que pone a prueba además de las piernas, los brazos y el culo!!!. Recordar que la piedra y la roca es característica común en todo el recorrido.

Pero desde luego, un rutón de los que hay que tener en la carpeta de rutas realizadas, cada uno a su ritmo, sin prisas, y disfrutando de este Parque Natural del Gorbea.

La compañía, no voy a descubrir nada nuevo, como siempre excepcional. Un placer compartir esta nueva aventura con mis incondicionales de la O.P.

Cuando queráis,...donde queráis..!!!!

Por cierto,..el Monte Oderiaga, ese que parece el Teide, igual.....
Bueno, no digo nada....

Tiempo real en movimiento 7 h 05'