Pedraza Matabuena Pradena

Gracias a Tabano Pro Race y su amigo Cucoqueren WRC, me planteé esta ruta.
Aunque Pedraza es un pueblo con un encanto muy especial, no hay que menospreciar a Matabuena y Pradena. Gente alegre de que pases por allí y con una hospitalidad increible.

La ruta en sí no tiene dificultades técnicas, excepto algún paso por Pradena y otro en la bajada a Huerta. En esta época, si cuenta con bastante agua y aunque es salvable en su mayoria, en el tramo de Pradena a Huerta hay unos charcos de unos 15 metros y con profundidad de algo más de 30 cms que terminas con las zapatillas hasta arriba de agua.

He dejado el pequeño tramo de detrás de Prádena que baja al rio, pero dado el caudal que lleva el camino está cortado y hay que hacerlo todo por arriba. Pero merece y mucho la pena, de bajar unos metros y observar como mana el agua de la piedra.

Otro sitio increible es el paso por La Dehesa Vieja de Pedraza, bosque de sabinas increibles.

La ruta cuya duración fue de 3h 15´, y paramos a tomar un cafelito en el Bar Emilia de Matabuena. Una mujer encantadora.

Con un desnivel de algo más de 500 m. solo hay dos subidas durillas, la primera a modo de calentamiento, nada más salir de Pedraza y la otra después del pueblo de Huerta.

Para tomar un bocadillo hay un sitio precioso a la salida del pueblo de La Mata junto a una lagunilla.

Como colofón, un corderito o cochinillo en La Olma, de Pedraza. En Pedraza hay un montón de sitios para comer cordero y en muchos de ellos guisan muy bien, con precios muy parecidos, pero yo tengo predilección por este, ya que aparte de la amabilidad de su dueño Sergio y el resto del personal, tiene una cuadra donde poder guardar las bicicletas a buen recaudo. Si eres más sibarita también te pueden conseguir duchas en el hotel del pueblo por un módico precio.