Puente Viesgo - Corrobarceno - San Martín de Toranzo - Collado de Gandarillas

Los Trankilos hemos vuelto a la montaña, y en esta ocasión nos juntamos Javi, Alberto, Marco y Sergio para replicar la Ruta nº 3 de los compañeros de Cantabria en Bici.
Como veréis, tenemos las novedades de Javi, que vuelve después del verano, tan fuerte como siempre…y no me extraña, ahora además de natación se nos está preparando para la media maratón, y todo ir querer ir corriendo detrás de su mujer ;-)
Y todavía más llamativa fue la presencia de Marco, después de 13 meses, le recuperamos para la causa, y desde luego doy fe que no se notó el parón, no había quién le dejase atrás, y no fue hasta el final que por fin demostró que es humano también jajajaja.
La ruta sale desde Puente Viesgo, donde de forma trankila empezamos a rodar, combinando carril y bici y carretera para ir calentando, porque eso sí hacía falta. La mañana la empezamos con 7º de temperatura, y encima si bien es cierto el día era despejado, hasta que no subió un poco el sol, el carril bici quedaba todo el rato a la sombra, y se notaba la “rasca” que hacía.
Por cierto el cuenta kilómetros de Javi mide temperatura y el de Sergio no…1-0
Esta primera parte fueron unos 16Km, con una muy ligera pendiente media del 4%. Después, antes de llegar al pueblo o barrio de Gamonal, tomamos un desvío a la izquierda donde se inicia la subida hacia el Collado de Gandarillas.
A partir de ahí fueron algo más de 10Km de continua subida, con una pendiente media del 9,5% y rampas por encima del 20%.
El cuenta kilómetros de Javi mide el % de las subidas y el de Sergio no…2-0
La subida merece realmente la pena, ya que las vistas son espectaculares del Valle de Puente Viesgo, y lo mejor los caminos atravesando los bosques…parecía como si en cualquier momento se nos fuese a parecer un ciervo, un jabalí o un oso, y sin embargo solo vimos babosas gigantes y una cuadrilla con sus motos y quads…
Marco aguantó casi hasta la última rampa, y si bien puso pie en una de ellas, hay que sacarse el sombrero, después de 13 mese lo que pudo subir…sólo se acordó del que propuso la ruta en algún pequeño momento, pero la cosa no fue a más...
El final de la subida tomamos un camino que nos lleva al otro lado del valle, digamos hacia los municipios de Aloños y Soto, pero que no tomamos, sino que simplemente nos asomamos para disfrutar del paisaje y desandamos de nuevo para iniciar el descenso.
Después de tanto subir, tocaba bajar, naturalmente, pero si subimos durante algo más de 10Km, la bajada fue de unos 8Km, con lo cual os podéis imaginar.
La bajada es por camino, algo roto por las lluvias, ancho y con curvas cerradas, es decir muy divertida, a la vez que puede ser peligrosa, por la velocidad sobretodo que puedes alcanzar… así que con mucho cuidado.
Y finalmente el último tramo de unos 10Km, de carril bici por la Vía Verde de Puente Viesgo, ya con una temperatura que llegó a superar los 20º y por tanto mucho más agradable.
La anécdota un ciclista de carretera que había pinchado y no llevaba la bomba para hinchar la rueda, Sergio le prestó la suya y no funcionaba, Javi sacó la suya…3-0…si es que así no se puede competir jajajaja.
Al final, ruta de unos 46Km, con un desnivel de subida acumulado de 953m, llegando a los 788m de altura y un índice IBP del 77, es decir asequible con un mínimo de forma.
¡Nos vemos en la próxima!