SALVATIERRA - LAS AMESCOAS - PUERTO NUEVO BAQUEDANO - MIRADOR UBABA - ALSASUA

Las améscoas es el nombre con que se designa el conjunto de pueblos navarros que se sitúan en un valle alargado y estrecho limitado por la sierra de Urbasa al norte y por la de Lokid al sur.

La Améscoa Baja está formada por siete pueblos (Artaza, Gollano, Barindano, Baquedano,Zudaire, San Martín y Ecala más el caserío de Urra) integrados en un único municipio. Cada uno de los pueblos tienen su territorio propio que comprende el labrantío y una parte de monte comunal. A su vez se integran en una entidad superior: el Valle. La Améscoa Alta, situada en el extremo de Navarra, limita con Álava, está formada por tres pueblos (Eulate, Aranarache y Larraona). La ruta preparada recorre buena parte de los pueblos del Valle de las Améscoas. Tambien buena parte de la sierra de Urbasa y la espectacular cabecera del río Urederra.

Comenzamos en la estación de Salvatierra Agurain y tras cruzar el pueblo tomamos la carretera que pasa el pueblo de Opakua y luego el puerto del mismo nombre. Tras coronarlo pronto se deja la carretera para coger una pista que al principio atraviesa unas campas y poco a poco se interna en el bosque hasta llegar a la ermita de San Benito.

El entorno de la ermita es magnífico, con unas hayas impresionante en el bosque de Artea. Entre las formaciones que allí se encuentran se inicia el descenso hacia el valle por el puerto de Larraona. Una pista encementada baja rápidamente y tras atravesar un portillo formado por dos grandes rocas llega al pueblo de Larraona.

Allí intentamos seguir el sendero local que une los primeros pueblos de Las Améscoas Altas pero debimos renunciar al primer tramo debido a que el sendero estaba muy cerrado por la vegetación y había gran cantidad de ortigas por lo que optamos por seguir la carretera que une los principales pueblos.

En Aranarache volvimos a probar y en esta ocasión el sendero estaba limpio y pudimos seguir por él hasta Eulate. El sedero discurre en casi su totalidad por un bosque mixto y dispone de una zona habilitada con mesas.

Desde Eunate hasta Zudaire, tras pasar San Martín, seguimos de nuevo por carretera. En Zudaire cruzamos el pueblo y seguimos un camino que pasa cerca de la playa fluvial donde apetecía parar para un buen baño. El camino sigue paralelo al río hasta que cruza un puente en un lugar con varias pozas y pequeños saltos de agua.

Allí comienza una dura subida que sin respiro nos llevó primero a Baquedano y luego por el Puerto Nuevo hasta situarnos sobre el nacimiento del río, espectacurlar paisaje con impresionantes cortados enmarcando un bosque infinito. La subida es muy dura, más con un día de altísimas temperaturas como el que tuvimos nosotros, pero la belleza del lugar compensa finalmente el esfuerzo realizado.

Una vez arriba fuimos siempre cerca del límite aproximandonos a los diversos miradores desde los que se tienen perspectivas diferentes de este privilegiado lugar.

Una vez que llegamos al aparcamiento del mirador pétreo de Ubaba seguimos la carretera que por el puerto de Urbasa nos permitió llegar al apeadero de este pueblo donde finalizamos el recorrido.