Semillas-Vuelta al Santotis-Semillas

Itinerario por pistas forestales considerado moderado por los continuos toboganes y algunas rampas considerables de subida, y algun tramo de pista de buldozer con mucho guijarro y la sospecha de acrecentarse la dificultad en la época de lluvias con barro fresco, aunque por la distancia y para los avanzados es facil y muy continua, aunque si nos equivocamos en los cruces podemos aparecer a saber donde.
Las pistas están abiertas al tráfico y de hecho nos encontraremos varios coches y sus roderas en el trayecto, sobre todo en época de setas. Por cierto nosotros hoy hemos recolectado unos cuatro kilos de níscalos a mitad de recorrido porteandolos a la espalda hasta el final, aumentando el handicap, pero con la recompensa que se degusta en la cocina los dias posteriores.
Comenzamos en Semillas, por pista ancha con hoyos encharcados esquivables y algun hilo de agua, que remonta hasta el collado del azoquejo, por los aledaños superiores del pueblo, con un bosque misto de encina y roble muy interesante.
Desde el collado divisamos todo el cordal del Santotis, y avanzaremos por su ladera norte, entre las cotas 1200 y 1300, con pista más o menos compacta y con una sucesión de toboganes tendidos para salvar las cabeceras de los arroyos que ramifican hacia el Sorbe, entre robles históricos primero y despues pinares de repoblación ideales para los micelios.
En un brazo terminal del alto cordal doblamos hacia el sur y descendemos por una loma que terminaria en los barrancos del Sorbe y que lo divide de sus tributarios barrancos que descienden del sur del Santotis.
El track gira hacia el este para descender hasta la majada de las juntas de estos arroyos, por una zona muy recondita, pero provista de pista. Este es el punto más bajo de la ruta, y despues del avituallamiento reglamentario nos toca remontar el desnivel por rampas similares a las de bajada. La pista discurre por la ladera norte de la Sierra Gorda, cordal paralelo a la del Santotis, pero tras una zona intermedia, donde hay una propiedad privada, volvemos a las faldas del Santotis, casi bajo su cima principal, cambiando ahora de vertiente d aguas , esta vez hacia el Este hacia desaguar al Alcorlo. Para girar de nuevo al Norte, aún deberemos escorarnos por las pistas a nivel de la ladera repoblada y poder soslayar las pedrizas y canchales del castillar de Robredarcas, por pistas ahora menos transitadas y no tán compactas, y tras el contorno de este estremo del cordal, incluso algunas bastas y con guijarros, siendo parte exigente para la moral, por lo ya acumulado y por los toboganes continuos y la falta de horizonte claro.
De repente llegamos a una fuente bajo la cara más esbelta y petrea del Santotis y ya con el pueblo a vista, con el resto de camino ya definitivamente de bajada, primero cerrando el circulo hasta el collado del azoquejo y despues repitiendo hasta el pueblo el tramo de la ida, pues nos dio pereza intentar la trialera que se intuye a vista y que figura punteada en la cartografía.
Cansados pero satisfechos por el Triatlón btt-niscaleo-porteo realizado y por el descubrimiento de esta zona con muchos valores y posibilidades.