Sendas del Poyo-Los Cerdos-La Torre (Sendas con 'chicha' de El Cortijo)--BTT

Ciclar con la bicicleta de montaña por senderos es una actividad que engancha, y si son por bosque mucho más. Subir con agilidad diferentes repechos, acometer escalones, negociar de la mejor manera el piso deslizante y rocoso, transitar con cierta alerta de peligro al ciclar una estrecha senda colgada del vacío en una empinada ladera, sortear de forma fluida la vegetación como si de un eslalon se tratara, descender rápido, bajar saltando, encadenando picados y toboganes, zigzag, tramos peraltados, etc., conecta con el crio que todos llevamos dentro. Soltamos de forma natural, adrenalina, endorfinas, etc. y nos recompensa con dopamina produciendo beneficios físicos y psíquicos. Produce alegría interna y externa que estimula evolucionar y mejorar nuestra técnica para superar las diferentes trampas -aunque un amigo diga que estamos muy mayores, y que nos vamos a descacharrar por algún barranco-, es realmente una acción que te hace estar vivo y que produce gran satisfacción y felicidad, por lo menos a mí…
Pero toda esta actividad no sería posible si no fuera por personas que invierten su tiempo libre en idear, posibilitar y poner en valor, senderos existentes u otros nuevos ,un maremágnum de caminos laberínticos sube y baja, negociando las curvas de nivel de las laderas pobladas de arbustos de forma desinteresada.Vaya pues, mi más sincero agradecimiento a todos ellos. Y voy a dar Gracias Niko Duke que he conocido personalmente.
Ya he dedicado varias entradas a las sendas ciclables entre Logroño y el barrio de El Cortijo, es mi particular homenaje a este entorno de llanuras, laderas y terrazas con muros de piedra destartalados, con campos, viñas, olivos, almendros, coscoja, alguna carrasca y sabina, aulagas, enebros, endrinos, tomillos, romero, salvia, matorral, etc. guarida de conejos, roedores y pequeñas aves y favorecido por unas fantásticas vistas que desde niño constituyó nuestra particular Serranía Bandolera con la imaginaria banda sonora de una guitarra y el graznido de las chovas, en mil y una aventuras. Esta vez he intentado aunar la mayor parte de todas estas divertidas y “asequibles” sendas pero como le gusta decir a un colega de estas lides con “chicha”, en esta entrada con el marchamo: Sendas del Poyo, Cerdos y La Torre (sendas con chicha de El Cortijo)-- BTT.
Sendas del Poyo-Los Cerdos-La Torre (Sendas con 'chicha' de El Cortijo)--BTT
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Para empezar poco a poco, comienzo a calentar evolucionando por el Parque de los Enamorados, conocido vulgarmente como Los Pinos. Sus senderos entre pinos de repoblación que rodeaban los antiguos depósitos de agua de Logroño, llenos de toboganes, repechitos, hacen las delicias de cualquier principiante. La verdad, es un parque con muchas posibilidades y no solo para pasear perros. Después de bajar por las escaleras situadas frente al colegio Ana Maria Matute, insigne escritora que veraneaba en Mansilla de la Sierra en el Alto Najerilla.
Comienzo con esta asequible para iniciados ruta, algo física e intensa debido a varios repechos explosivos que vamos a acometer y que nos pueden dejar sin aliento. Nos introducimos subiendo por la parte baja de la Senda de Valdegastea. Entre los ascensos de rigor, atacamos dos subidas con cierto yuyu (patio) hacia la izquierda y un picado, para ir subiendo pulsaciones. Enseguida, desviamos nuestra derrota a estribor (derecha) para subir al Cerro del Pilar para bajar por su senda Norte. Buenas, vistas y fácil senda, ¡atentos! a marchar por fuera de la erosionada barranquera.

Al llegar al camino Viejo de Fuenmayor, frente a la bodega El Rey de Viñas podemos observar hacia la derecha la cara S. de la pequeña meseta que es El Poyo Agudo, este va a ser nuestro primer “Bike Park”.
Tras subir y pasar la bodega por el camino cada vez más deteriorado, también conocido Camino de la Casa del inglés, tomamos una senda que sube hacia la derecha en oblicuo, es la Senda Poyo Alto, también llamada Bodegas. Esta senda marcha elevada por la ladera O. y Sur sin subir a la viña que corona la loma, sorteando la coscoja con un piso seco con componente E.



En el extremo, bajamos NE (babor, izquierda) y sin llegar al sembrado final, nos dirigimos hacia la izquierda (cruces señalados con hitos) para disfrutar por la cara N. por la Senda La Conejera. Embestimos el llaneo, las bajaditas y pequeñas subidas entre la tupida y algo húmeda vegetación arbustiva que dispone de un piso y una ejecución magistral.
Al llegar al camino por llamarlo algo, subimos (izquierda) y tomamos al rato un atajo hacia la izquierda que nos deja en el camino que sube a la viña, cimera.
La bordeamos por el bosquete de carrascas de la izquierda y salimos al pedregoso terreno de la cima, ciclando por la izquierda de las cepas. Nos metemos en la boca del lobo por el extremo izquierdo por una bonita bajada entre las carrascas y la coscoja para desembocar en la mitad de la Senda La Conejera. De nuevo, vamos hacia la izquierda pero al poco, (hitos) bajamos hacia la derecha por la Senda NorthFace. Al igual que su hermana mayor paralela, disfrutamos por ella hasta desembocar al final en la pista de grava del Camino Viejo de Lapuebla.
Seguimos en asequible subida y en una curva a la derecha nos salimos hacia la izquierda por una senda atajo que discurre entre el término de Rodejón y el Camino de la Rad. Este acortamiento marcha por encima de una viña y al final tiene dos pequeñas rampas que conviene atacarlas con suficiente inercia.

Bien, ahora el primer subidón por la llamada Cuesta de los Cerdos, el mote le viene a este Camino de la Rad, porque no a mucho que había cerca de su cumbre llamada Peña Águila (544m.) una explotación de cerdos ibéricos entre las encinas.
¡Vamos allá!, atraviesas con decisión el pedregal de la base, y por el pendiente y estrecho costado derecho arcilloso asciendes con todo el molinillo y puesto en pie, atraviesas una pequeña barranquera y subes los pequeños escalones de roca, piso pedregoso ,al rato paras para recuperar el resuello y embocar por la senda Trocha de los Cerdos.
Para empezar, dos cerrados zigzag y tras una travesía hacia el E. ciclamos rumbo N. por sendero, camino y senda entre monte bajo y olivos.
Al salir a la pista bajamos un poco (derecha), ¡ atentos !, porque tras ir por el linde del sembrado tomamos la Senda Castillo Medo. Ciclamos por la parte alta de la ladera con el reojo en el patio a nuestra derecha. Por debajo de nosotros transcurre una senda que luego disfrutaremos.



Salimos a la Senda Asalto a la Torre y ahora la tomamos en subida hasta un vistoso almendro ahora florido, desde el cual nos desviamos hacia la izquierda para subir por la Senda Castillo Suso.
Desembocamos en el Castillo (cumbre Cuesta de la Isla de 554m), una torre de piedra que realizaba señales ópticas y que formaba una red de aviso y alarma, erigida en el s. XIX para avisar a los liberales de los movimientos carlistas.
Disfrutar de la panorámica y avituallaros un poco, porque la ruta no es larga pero si enérgica.
Ahora bajamos la Senda Asalto a la Torre y la prolongamos (hitos) hasta conectar con la senda que antes he mencionado, Castillo Yuso y que marcha un poco más baja y paralela a Castillo Medo en la pequeña colina, ahora con el yuyu a la izquierda.
Al final, desembocamos en la pista que sube hacia las antenas y vamos hacia ellas, pero a mitad de camino nos tiramos hacia la izquierda por la primera Trailera del Cortijo ,sector I. Bajamos por su costado izquierdo y tras atravesar la pista enlazamos con la segunda trailera Cortijo Sector II.
No vamos a bajar por su abrupto final, así que a la mitad nos escoramos hacia la izquierda entre lo que queda en pie de las esculturas de arte reciclado para bajar hacia la Senda Vuelta a la Torre.

Nos lleva hacia el depósito de agua de El Cortijo y tras reponer el agua en la fuente de la plaza, marcho cruzando por encima de la Vía Verde del Cortijo hacia una senda que me gusta mucho, la Senda El Rincón.
Casi siempre coincido con gente deambulando por esta senda que ladea el costado O de la pirámide pétrea y arcillosa del Monte El Rincón de 488m.
Al bajar, prosigo por el costado izquierdo de la viña junto a la vegetación que antiguamente fue el bosque dominante, hacia el sendero del meandro . Subiendo y bajando las lomas pedregosas junto a las cepas voy hasta el Puente Mantible.
Estamos de enhorabuena porque después de dejarnoslo derrumbar hemos reconstruido este Monumento Nacional. declarado en malos tiempos para la lírica ,1983



Se sabe poco de él, sustituyó posiblemente a otro anterior romano. Los restos actuales parece que corresponden a uno de 164m. de longitud, una anchura de 5m y una altura máxima de 30m. que comunicaba en el s. XI Pamplona y Nájera cuando esta era corte del reino Navarro, mandado construir posiblemente por Sancho III El Mayor.
Dice una vieja leyenda que por este estratégico paso, lucharon en combate singular dos gigantes, Fierabrás que poseía un bálsamo sanador de heridas, por parte de las tropas del rey galo Carlomagno y Galafré adaliz de las tropas moras que defendía el paso del puente, único en todo el río. Vencieron las tropas galas…
Regreso hacia El Cortijo recordando las palabras del escritor Don Pedro Calderón de la Barca en una de sus comedias: ¿Ves ese monstruo terrible que del agua nace?, ¿Ves ese prodigio? , Es la gran puente de Mantible ; Y sin pérdida de tiempo subo de nuevo a luchar junto aLa Torre. .lugar que siempre me ha fascinado.

Ahora toca bajar por la Senda de la Isla. Esta senda que desciende poco a poco al principio, seguidamente se precipita con bastante inclinación hacia la pista que bordea la montaña por su lado N.
Continuo hacia la derecha y pasado el bonito mirador con fuente , tomo hacia la izquierda el Sendero Paralelo, en un principio sorteando la coscoja y después con piso pedregoso bajar junto a la valla del antiguo vertedero, que nos favorecía con su aroma y buqué de lipsidiados a todos los que vivíamos en la Zona Oeste.

Bajamos por la pista tranquilamente hacia Logroño, pero coger fuerzas y aire suficiente en los pulmones, para cruzar el sembrado y ascender con impulso por la explosiva cuesta por la ladera NE del Poyo Agudo que marcha por el E. de este, por encima de las instalaciones deportivas de la U.D. Logroñés, por una prolongación de la Senda Poyo Alto.
Para bajar las pulsaciones, por el asfalto y las edificaciones regresamos donde hemos empezado esta divertida ruta, al parque de Los Enamorados.