TARDIENTA - ALBERCA DE ALBORÉ - ATALAYA DE TORMOS

La grulla común es un ave muy popular debido a su gran tamaño, sus cantos y su comportamiento durante el vuelo. La laguna de Gallocanta es el lugar donde más ejemplares se reunen en época de migraciones. Sin embargo hay otros sitios donde también es posible observarlas en gran número.

La alberca de Alboré es uno de esos puntos. Se trata de una laguna que forma parte del embalse de la Sotonera. En torno a ella se concentran miles de grullas antes de sobrevolar los Pirineos con destino a Europa. Para observarlas han habilitado un mirador en las proximidades del pueblo en una zona relativamente elevada.

La ruta parte de Tardienta para ir hasta el mirador. Tras superar Almudevar pasa por algunas balsas aisladas que contribuyen a la fomentar la biodiversidad en esta zona de la Hoya de Huesca.

Seguidamente se interna en el parque eólico de Saso Plano. Saso es un término aragonés que define llanuras elevadas que finalizan en pronunciados escarpes. Es precisamente por uno de esos escarpes por donde desciende el camino siguiendo la Cañada Real de Lupiñén. En su inicio hay unas buenas vistas de la zona oeste de la Hoya. Y al final de la bajada podemos observar una formación geológica denominada "piping" similar, aunque de menores proporciones, a los Aguarales de Valpalmas.

De camino al mirador se pasa por los pueblos de Ortilla y Montmesa y se cruzan los ríos Sotón, Rigel y Asón. En algún caso por puentes y también por algún vado por lo que habrá que tenerse en cuenta en época de lluvias.

En el mirador disfrutamos un rato viendo pasar los grupos de grullas y escuchando las explicaciones que nos dió una persona sobre estos animales.

De regreso nos acercamos hasta la Atalaya románica de Tormos que ofrece unas vistas impresionantes del embalse de la Sotonera que en estos días está casi lleno.