Valencia - La Vallesa - Endolçà

Ruta circular saliendo de Valencia que permite disfrutar, sin tener que coger el coche, de divertidas sendas a aquellos que buscamos algo más que pistear con la bici de montaña.

Comenzamos por la Vía Fluvial del Turia, que seguimos hasta cruzar el By-Pass. Ahí nos adentramos en la Vallesa por una senda que sale a la derecha. Vamos paralelos al río hasta coronar el alto que hay frente a la Presa, buen lugar para hacernos un selfie. Seguimos adentrándonos en la Vallesa con algún repecho y bajadas divertidas en dirección a la entrada de la Vallesa desde La Cañada. Bajamos paralelos a la valla metálica que separa la finca privada de los condes de Trenor hasta el viaducto, donde está la trialerita y senda que bordean la Lloma de Betxí, que grabamos en vídeo.

La Lloma de Betí es un poblado de la Edad de Bronce con unos 4000 años de antigüedad. Se puede visitar el recinto amurallado, estratégico por estar cerca del río y con unas buenas sobre el valle fluvial del Turia. Vale la pena dejar la bici unos minutos y subir a la loma.

Continuamos por sendas y pistas alejándonos del río de nuevo para tomar una trialera de bajada con un par de puntos muy técnicos que nos obligan a echar el pié en el suelo. En el punto más alto hay una buena panorámica y tomamos otra foto de grupo con la Vallesa de fondo.

Volvemos sobre nuestros pasos para tomar la senda que se dirige hacia la Cañada, en la que hay un tramo de subida por donde va el tendido eléctrico que es todo un reto hacerla sin tener que bajarse.

Ya en la Cañada nos adentramos también por sendas para evitar la pista paralela a la autovía. En el tramo final cerca del metro hay unos saltos que conviene hacer a velocidad para disfrutarlos, pero teniendo cuidado con el último que da directamente a una carretera por la que pasa algún coche. Cruzamos con cuidado la vía y pasamos por unos túneles al otro lado de la autovía, encontrándonos con el Polígono Industrial de la Fuente del Jarro.

Tomamos una senda paralela al parque superior del polígono para ascender a lo alto de la loma, desde la que hay una vista panorámica de València impresionante. Ya en el antiguo campo de entrenamiento militar de Paterna, nos dirigimos a toda velocidad hacia la divertida senda de los toboganes, que conviene hacer alegres de ritmo pero con cuidado, pues una caída ahí puede ser fatal.

Llegando a Paterna, hacemos la senda final del barranco de la Endolçà y, ya por carretera, entramos en Paterna para dirigirnos entre los cultivos a Nou Campanar y buscar el bar donde nos regalaremos un merecido almuerzo que ponga punto final a una buena mañana de BTT.

En la ruta de hoy me acompañan mi buen amigo Pedro, Míchel y Luís, con los que además de compartir pasión por la bici, se pueden echar unas risas y degustar un buen almuerzo.