Valladolid - Villabánez - Sardón - Senda del Duero

Ruta larga, pero muy variada, con páramos, pinares, riberas y canales, alternando parameras bien soleadas con otras zonas más frescas y arboladas, subidas al páramo, zonas llanas y tramos rompe-piernas.

Sale de Valladolid hacia La Cistérniga, aprovechando el pobre carril bici que se corta sin más cerca de una rotonda y obliga a cruzar la carretera a pie (y con mucho cuidado) hasta la acera opuesta en donde milagrosamente renace.

Subida hasta el páramo por la antigua carretera de subida a los repetidores del Pico del Águila, hoy ya con poco asfalto. Bajada hacia el valle del Duero por camino en estado aceptable y pista ancha y buena hasta Villabáñez.

Desde Villabáñez hasta el valla del Duero por un camino muy interesante, con buenas vistas y en donde brillan los cristales del mineral del que se obtiene el yeso. Ahí se enlaza por donde iba antes la Senda del Duero, que ahora está también marcada por la orilla opuesta del río.

Pegado a la orilla del río, la senda pasa junto a los impresionantes cortados que hace el Duero antes de llegar a Peñalba. En esta zona puede haber algún tramo corto poco ciclable. Desde Peñalba hasta Sardón por pista en buen estado.

En Sardón se cruza el puente sobre el Duero y justo al otro lado se toma la Senda del Duero, muy bien señalizada. El primer tramo va por la orilla del Canal del Duero, estaba en muy buen estado, perfectamente ciclable y con paisaje espectacular, con el canal a un lado y el río al otro.

Al terminar el tramo junto al canal, comienza la pesadilla: la senda, ya de por sí dura y algo compleja para ciclar, estaba invadida por la maleza. Imposible salir de allí sin el cuerpo lleno de arañazos y ortigado por por todas partes. Si no desbrozan y limpian bien este tramo, no recomiendo a nadie pasar por allí, lo cual es una pena.

El tramo malo acaba en Tudela, desde allí se sigue en parte la senda hasta Herrera, en donde se coge un tramo de carretera hasta el Canal del Duero. Cerca de Laguna se deja el canal y se sigue la orilla de la acequia de Laguna.

Finalmente, pasando por la zona de la playa, se llega hasta Puente Duero. Falta el tramo de vuelta hasta Valladolid, que se puede realizar ya cómodamente por el carril bici de la carretera de Rueda o atravesando el Pinar de Antequera.

En resumen, salió una ruta muy recomendable por la variedad de recorridos y paisajes, aunque deslucida por el tramo de la Senda del Duero sin desbrozar, que es de esperar se arregle o en poco tiempo quedará completamente intransitable.