Villafranca de los Barros - Villanueva de la Serena

Vamos a por la tercera etapa de nuestro Peregrinar a Guadalupe.
Después de pernoctar en Villafranca de los Barros, nos levantamos en una mañana fría, tan solo un par de grados nos calientan.
Salimos del pueblo por el Camino de Hornachos. Pocos kilómetros nos separan de la cercana localidad de Ribera del Fresno. Brumas mañaneras y escarchas decoran el paisaje de la "Tierra de Barros".
Por carretera nos plantamos en Puebla del Prior, donde su único bar, a pesar de rezar "abierto 24 horas", no nos permite desayunar ¡porque está cerrado! :D:D
Seguimos pues por una magnifica pista hacia el próximo pueblo, Palomas.
Coincide aquí nuestro camino con la Cañada Real Leonesa. Eso, aunque nos asegura que existe una vía de transito entre Andalucía y la Meseta, nos guarda una sorpresa que, unos kilómetros adelante, va a hacernos cambiar nuestro recorrido.
Llegamos al Río Matachel y, debido a las lluvias de la semana pasada, es prácticamente imposible vadearlo, lo intentamos río arriba, río abajo y nada. Total que no hay mas remedio que volver atrás hasta el camino que traíamos desde Puebla del Prior y seguirlo dirección Norte hasta la carretera de Villafranca de los Barros a Palomas.
Pasamos así junto a la Ermita de Botos y algunos kilómetros mas tarde , al coronar una larga subida volvemos a nuestro recorrido proyectado. Lo que hubiesen sido algo menos de 3km se han convertido en 8,5. Son las cosas de recorrer tierras desconocidas. :)
Llegamos por esta carretera hasta Palomas, a la que entramos por un bonito puente medieval y donde nos disponemos a desayunar,
El tabernero, que comparte afición con nosotros, al oír nuestro relato, nos aconseja tomar un itinerario alternativo al previsto ya que, algo mas adelante, otro arroyo, en este caso el de San Juan, nos asegura que debe estar bastante crecido y nos dará problemas.
Le hacemos caso sin rechistar y decidimos salir de nuevo por carretera hacia Oliva de Merida. Aprovechamos el trazado de la antigua carretera que esta en buenas condiciones para nuestras monturas y nos aleja del denso tráfico de la "nueva". Vamos subiendo un llamado "Puerto de las Palomas" que, afortunadamente tiene poco en común con el famoso de la provincia de Cádiz. En un paraje un tanto desangelado una ermita, la de San Isidro, nos ve pasar con sus puertas cerradas a cal y canto.
Llegamos así a Oliva, que atravesamos sin nada que reseñar.
Pronto alcanzamos la cercana Cristina y sin dilación es Guareña la que nos abre sus calles.
Gira nuestra ruta aquí hacia el Este y salimos de este último pueblo por el Caminos de los Gameros de Guareña que nos llevará a Don Benito.
Se pasa aquí por un precioso paraje que nos regala el Río Guadámez que cruzamos por un magnifico puente.
Algo mas tarde, se cruza nuestro camino con el Canal del Zujar, por el que vamos a ir hasta casi nuestro destino.
El pedalear por la banqueta del canal se hace cómodo e invita, a pesar del cansancio acumulado, a acelerar el ritmo.
Otra sorpresa liquida nos sale al paso unos kilómetros antes de la capital de la Comarca de La Serena. En esta ocasión el Arroyo Ortiga, con una vado que, si bien no profundo, con una anchura de unos 20m nos retiene unos minutos hasta que decidimos cruzarlo descalzandonos. ¡¡Que fría estaba el agua!!
Ya en Don Benito lo circunvalamos por un carril bici fabuloso, y sin parada, cogemos la Vereda de Don Benito a Villanueva de la Serena, a la que llegamos por la rotonda junto a una conocida tienda de deportes.
Buena tirada la de hoy. Salpicada con alguna que otra anécdota pero muy gratificante.
Mañana más.