Villímar - Cótar - Via Itálica - Quintanapalla - Olmos de Atapuerca - Camino de Santiago

Partimos de Villímar hacia el convento de San Esteban de los Olmos, desde el cual se llega fácilmente a Cótar en línea recta. Desde allí se toma un camino señalado por un panel que marca "Alto de las Torrecillas" del cinturón verde de Burgos.
Una vez en lo alto veremos la AP-1 , y una vez pasado un centro canino veremos un cartel que marca "Vía Itálica" hacia la izquierda. Esa antigua calzada romana que unía Milán y León está recuperada durante unos 6 Km. en el término municipal de Quintanapalla, con paneles informativos. La recorremos desde el punto inicial hasta algo más de la mitad, donde la abandonamos por una pista que baja hacia Quintanapalla a mano derecha.
Cruzamos la N-1 en dicho pueblo , (ojo con el tráfico) y tomamos un camino perpendicular a ella. Al rato llegaremos al cruce de la carretera que va a Barrios de Colina con la de Atapuerca, por donde deberemos tomar ésta última subiendo al puente que pasa por encima de la vía del tren Madrid-Irún.
Nada más entrar en Olmos, debemos girar a la derecha por el camino que se dirige a la cantera Ariolsa. Dicho camino sube hacia la sierra de Atapuerca, a través del geoparque minero "Mina Esperanza". Ésta puede ser la parte más dura del recorrido. Una vez en lo alto, dejaremos a la izquierda las antenas de Rubena, cuyo término municipal estamos atravesando. Hay que girar a la izquierda (de otra manera bajaríamos al pueblo), y ya comenzamos a ver señales del Camino de Santiago, que viene desde la Cruz de Matagrande.
Tras pasar al lado del túmulo funerario neolítico "Villalval I", giramos hacia la izquierda para continuar camino por la Ruta Jacobea, la cual transcurre por los pueblos de Villalval (antiguamente deshabitado, afortunadamente ya no) , Cardeñuela Riopico , Orbaneja Riopico y finalmente Villafría.
Cruzamos nuevamente la N-1 en dirección a los campos de fútbol de Pallafría, desde los cuales parte un camino que, sobrepasando la circunvalación por un puente, nos lleva de nuevo a Villímar