Vuelta a Santander (Cantabria) 01-01-2016 (bici) O

Comenzar el Año Nuevo dando pedales es una buena opción.
Así que sin planificar nada especial me decido a recorrer el litoral sur y norte de Santander.
El viento sur continua soplando con fuerza (ya lleva casi dos meses así) por lo cual acercarse a la bahía y ver el cielo "asurado" y la bahía agitada será un espectáculo. Normalmente la bahía esta calma y es abrigo de las embarcaciones pero cuando sopla "el sur" todo cambia y parece que es mar abierto.

La ruta es un recorrido, ya realizado de forma similar, en alguna otra ocasión pero siempre apetecible. Primero por la parte sur que recorre la parte más urbana de la ciudad pero donde hay trazado, en una gran parte del recorrido, un carril bici.
En el way point 1 se abandona el carril bici cargando con la bicicleta a cuestas un tramo de escaleras para iniciar el paseo de la senda costera de Cabo Menor y Mataleñas hasta llegar al Faro de Cabo Mayor. A partir de este punto las cosas se complican. El viento sopla de cara con fuertes rachas que dificultan y endurecen el pedaleo. No obstante disfrutar del paisaje de la costa norte, ya a mar abierto es una gozada. Las olas con marejada son acercadas a la orilla pero el viento lleva la espuma en dirección contraria lo cual genera un efecto que no siempre se pude ver. Además, al fondo, la silueta de los Picos de Europa nos dicen que estamos en el "Viejo Continente". Esta nomenclatura de "Picos de Europa" o "Peñas de Europa" viene de la época en la que los barcos que venían de ultramar al ver los picos de la Cordillera sabían que se estaban acercando a tierra.

Califico la ruta de "moderada" porque la parte final por la senda costera entre el Faro de Cabo Mayor y Ciriego es un camino que aparentemente es fácil pero debido a lo suelto y escabroso del terreno tiene cierta dificultad. No obstante para quien no se quiera complicar hay caminos y carreteras asfaltadas que van un poco más interiores por los que se puede pedalear sin ninguna dificultad pero por contra no se tiene la sensación de ir tan pegado al mar.
Esta senda es perfectamente practicable y muy recomendable hacerla como paseo.