Vuelta al Anboto (versión picante)

Quinta versión de este clásico del mtb en Bizkaia, la vuelta al cordal del Anboto. Hacía ya 4 años que no venía por aquí, y en este tiempo el tipo de mountain bike que practico ha cambiado un poco, algo que se ve reflejado en esta quinta versión. La "ruta base" es la de 2017 (https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/vuelta-al-anboto-2017-20165733), pero con 3 modificaciones relevantes, como veremos ahora.

El coche lo dejamos en el parking del campo de fútbol de nuevo y comenzamos a subir alternando senderos con caminos vecinales hasta las canteras de Atxarte, donde la subida se pone seria ya por pista de hormigón. No mucha historia en el resto de la subida hasta el repecho final para llegar al mirador de las cruces, con tramos salvajes por encima del 30% en los que hay que darlo todo para no echar pie a tierra.

Una vez en el santuario, hacemos un bucle desde el parking para hacer la bajada que en Trailforks se llama Arrapazak! Ya intuía que iba a ser una bajada "entretenida", pero la verdad es que supera mis expectativas por lo cañera que es... ya hemos tenido un pequeño spoiler en la subida, ya que la bajada atraviesa la pista de subida y nos asomamos a ver el aspecto que tiene. La bajada arranca con un salto sobre un tocón y una recepción complicadilla, para seguir enlazando peraltes y saltos por el pinar. Algunas zonas están machacaditas, no sé si por el paso de muchas bicis o de unas pocas motos, pero se puede bajar bien. Y de repente, cuando te has confiado en que la cosa va a ir fluyendo sin sobresaltos, te encuentras con unos pasos verticales enormes de poner los cojones de corbata, de esos en los que no paras la bici si no es contra un árbol. Tenemos un par de caídas sin consecuencias en el grupo y disfrutamos de una parte final con pequeños wallrides y saltitos más sencillos, pero alguno llega abajo con el susto metido en el cuerpo.

Toca remontar de nuevo, la pista.... y el rampón infernal de antes del mirador, que no contento con subir una vez, repetimos. C'est la vie! A diferencia de hace 4 años, esta vez no hacemos el alarde de subir a la cumbre del Urkiolamendi (segunda diferencia) y seguimos por la pista Pol-pol hasta el punto más alto de la ruta, donde comienza el sendero de la cumbre final para senderistas. Nos abrigamos bien (2 graditos!) y comenzamos a bajar, primero por una trialera bonita, luego alternando pistas más o menos rotas hasta asomarnos a las cumbres de Tellamendi y Lurgorri y buscarnos la vida para volver campo a través a la pista. En ocasiones podemos bajar en paralelo a la pista por senderitos o campa a través, lo que hace más ameno el descenso. Otras veces el sendero se mete por los pinares donde bajamos pumpeando a toda velocidad. No es enduro, pero también mola.

Llegamos así a Betsaide, que rodeamos por su derecha por sendero para tras unos metros de ascenso por pista llegar a un cruce donde en lugar de bajar ya por la pista de la izquierda hacia Apatamonasterio, remontamos hacia las cresta del monte Memaia. Esta es la tercera innovación con respecto a 2017 y es la que realmente aporta novedad a la ruta. Ya entonces me quejaba de que tenía que haber otra forma de perder toda esa altura diferente a bajar por una pista de 5m a toda velociad hasta la carretera, y aquí está. Hace unas semanas estuve por la zona (https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/memaia-enduro-69408699), por lo que tengo claras las opciones que hay. Para hoy elijo la bajada Otalorea, una masterclass de curveo por pinar sin demasiadas complicaciones que solo en su parte final se pone un poquillo más complicada con un par de horquillas verticales tras un salto de madera y dos divertidísimos wallrides. Es una auténtica maravilla esta bajada, apta para todos los públicos, de bajar fluido disfrutando como un enano.

Para la vuelta desde Elorrio hasta Durango, tal y como hicimos en 2017 seguimos tramos de vía verde, otros de bidegorri y otros de pista de servicio de la autopista, siempre buscando opciones sin tráfico. Se da más rodeo que por carretera pero se va mucho más relajado, la verdad.

Una ruta de mountain bike clásico, donde hay de todo y donde disfrutamos de las vistas del Anboto durante prácticamente toda la mañana desde todos los puntos de vista posibles. No es una ruta de enduro, pero Arrapazak! es una bajada endurera con mayúsculas, de dificultad roja oscura. Al final nos salen 1800m+, por lo que tal y como la hemos hecho, es una ruta exigente físicamente y de un nivel técnico dificil por Arrapazak!. Evidentemente, quien no quiera meterse en jardines puede obviar dicha bajada, quedando una ruta de 45km y 1400m+, técnicamente asequible para todo aquel con un manejo de la bici normal. La bajada Otalorea, sin ser tampoco fácil, es asequible para alguien acostumbrado a andar en bici de monte.