Zamora. Lagunas de Villafáfila. La Lampreana y Tierra de Campos. 4-JUN-16

Ruta con predominio total de pistas, alguna casi cerrada por el escaso tránsito; muy asequible por lo llano del trazado y, como hay gran cantidad de pistas de concentración, se puede acortar a voluntad si se dispone de menos tiempo o ganas. En esta primavera lluviosa las lagunas están a rebosar y es fácil ver muchas aves, tanto acuáticas como esteparias.
El comienzo de la ruta es en La Encomienda, junto al Embalse de Ricobayo, pero podría empezarse en San Cebrián de Castro con lo que se eliminan 16 km. Desde San Cebrián tomamos el Camino a Quintanilla, una pista que se interrumpe a los 600 m: hay que tomar un desvío para volver a ella tras 1,4 km y seguir por campos de cereales hasta llegar a Manganeses de la Lampreana. Continuamos por las amplias pistas de concentración parcelaria durante 9 km hasta llegar a Villarrín de Campos. Es fácil ver por estos pagos avutardas, en bandadas de dos docenas, pastando por los campos.
Desde Villarrín hasta Otero de Sariegos la pista se convierte en camino poco o nada transitado con mucha vegetación que se sortea bien hasta llegar a una zona inundada en la que al principio se puede pasar, pero al final hay que bajar de la bici y andar unos metros por el agua y el cieno. No se puede evitar. A la entrada de Otero hay un pilón en el que refrescarse. Más adelante se llega a un observatorio de Aves frente a la Laguna Salina Grande. El observatorio, abierto los fines de semana, tiene dos telescopios de visión menos que regular. Es muy conveniente llevar prismáticos en esta ruta.
Seguimos por el Camino a Tapioles y lo dejamos a los 2 km para tomar la Vereda de Toro que nos lleva hacia la Laguna Parva y un poco más adelante pasamos por encima de los restos de un puente romano. Luego salimos a la carretera y llegamos al Centro de Interpretación de la Naturaleza, instalación que abre los fines de semana para documentar a los curiosos y visitantes en general.
Un poco más adelante, por la misma carretera llegamos a Villafáfila. A la entrada, en el Meson Las Lagunas, hay avituallamiento de calidad y aprovechando que llevamos la mitad del recorrido nos damos un homenaje.
Tras el refrigerio salimos por la carretera que se dirige a La Tabla, Santovenia o Granja de Moreruela y la dejamos tras poco más de 1 km por una pista que lleva a la Cruz de Villalba y después, por pistas más o menos amplias, seguimos hacia Granja de Moreruela pasando por un puente sobre la vía abandonada del ferrocarril Plasencia-Astorga.
Más adelante llegamos a Riego del Camino y después a Fontanillas de Castro; las obras de la autovía han destruido al camino original por lo que hay que pasar por debajo de la carretera dos veces y bordear un sembrado arrastrando la bici (se puede evitar siguiendo la carretera). Después de cruzar el Embalse de Ricobayo por el puente de la Estrella se llega al punto de partida.