Cabeza Arcón y Cerro el Pendón (desde Collado de la Fuente)

Actividad muy agradable que discurre cercana a Madrid, en una bonita zona que además suele estar poco transitada. Bosques, praderíos y zonas rocosas son los paisajes predominantes. Varios miradores nos proporcionan unas fantásticas vistas hacia todos los puntos cardinales.

La M610 lleva hasta el madrileño pueblo de Bustarviejo, punto de salida de bonitas rutas que discurren por la sierra madrileña. A las afueras del pueblo, dirección Miraflores de la Sierra, se encuentra una bonita zona, Collado de la Fuente, que cuenta con una zona de picnic, restaurante, kiosko / chiringuito y una espectacular fuente de cuatro caños de la que manan permanentemente sendos chorros de agua serrana. En las inmediaciones hay también una cómoda zona de aparcamiento de tierra donde aparcar el coche. Y desde allí, por un pequeño sendero, se camina hacia el GR10, con la dura subida del cortafuegos a la vista.
El ascenso por este cortafuegos se hace rápido y, enseguida, si miras atrás, ganas unas fantásticas vistas hacia el valle.
Para darle algo más de emoción a la ruta, siempre abandono el senderito en la parte final, para desviarme hacia las rocas y entretenerme haciendo trepadas.
Alcanzada la cumbre de Cabeza Arcón, saco el equipo de radio y hago la activación SOTA EA4/MD-053. Charlo con los compañeros de diversas partes del mundo, recojo y emprendo el camino hacia el lejano Cerro el Pendón. Por el camino: bosque, zonas de roca muy "pedriceras" y un par de miradores fantásticos hacia Bustarviejo, que invitan a la relajación y la contemplación.
Tras reemprender la marcha, se llega al collado, desde donde salen caminos por la izquierda hacia Bustarviejo, por la derecha hacia el Badén, y de frente el que me llevará hasta el Cerro el Pendón.
Primero discurre por terreno con jara baja y algo de arbolado. Poco a poco va aumentando el grado de aparición rocosa, hasta el punto de que en algún momento hay que usar las manos para ascender, en especial cuando el agua que baja por las planchas de roca se encuentra helada. Y, finalmente, un denso bosque de duras jaras, sobre el que se encuentra recortado un sendero del que no puedes salirte.
Se corona al poco el Pendón y es obligada la parada para disfrutar del paisaje, a pesar de que el cielo luce especialmente feo, debido a una enorme inundación de polvo sahariano.
Después comienza el descenso hacia el Badén, no sin antes hacer alguna última trepada a los riscos que aparecen en el camino. Abandonados estos y de nuevo entre jaras y praderío, toca la bajada fuerte, jalonada por pequeños torrentes de agua que van a verter a la predera/laguna del Badén.
Alcanzada esa parte baja, hay que bordearla siguiendo la trayectoria del vallado de piedra, ya que se encuentra anegada de agua. Y comenzar el último ascenso fuerte, hacia Cabeza Cristina, rodeado de jaras de más de dos metros. Una última parada en esa zona para contemplar el paisaje y el último descenso fuerte por el bosque de la Cuesta Lóbrega, que enlazará finalmente con el GR10, por el que queda un tramo hasta alcanzar de nuevo el cruce con el cortafuegos de subida por el que comenzó la aventura de hoy.
Solo queda disfrutar de la merienda en el kiosko del Collado de la Fuente. Y despedirse, por hoy, de esta bonita zona de nuestro entorno.