Circular al corazón de Sierra Nevada: Güejar Sierra, Juego Bolos, Raspones de Río Seco, Púlpito, Veleta, Barranco San Juan

Salgo desde el inicio de la vereda de la Estrella, acompañado por mi papi.
En unas tres horas llegamos a la Junta de los Ríos desde donde seguiré solo.

A la altura de Cueva Secreta cruzo el Valdeinfiernos y paso al Valdecasillas a través de la Majá del Palo. La subida ahora es quebrada y poco clara, resultando bastante dificultosa por los 23 kilos que llevo a la espalda (me caí al río en uno de los pasos, vamos, jejeje).

Siempre en subida, por uno u otro margen, finalmente llego a la base del corredor norte (de los varios que hay él más claro) y, dejando la vereda que sube a la laguna de La Mosca, tiro a la derecha, todo para arriba, con una nieve paposa que me hizo sufrir de lo lindo.

Una vez arriba me dirigí al refugio de la Caldera a través del Collado del Ciervo (sobre todo para ver si había sal, que se me había olvidado echarla y la nieve derretida sin una miaja de sal está más mala y no sienta tan bien).

Tras la subida a Loma Pelá para evitar el rodeo de la pista, bajé a las lagunas de Río Seco, donde preparé el vivac para la noche en un entorno inmejorable y con mucha nieve.

A la mañana siguiente crucé Los Raspones a través de uno de sus corredores y bajé a la Laguna de las Cabras, donde rellené agua de uno de sus nacimientos y ascendí al Púlpito. Enclave salvaje de la cuenca del Veleta, con unas magníficas vistas y, sin embargo, poco visitado por la montañeros en general.

Desde aquí toca atravesar la cuenca del veleta y, siempre en ascenso, más o menos pronunciado, subir disfrutando de la soledad y con un romántico espíritu de explorador (qué le vamos a hacer), hasta el pico veleta. La parte de escalada que va desde la base, por debajo del Collado donde acaba el corredor norte del Veleta, hasta dicho Collado ha sido especialmente dura, primero por la nieve paposa y luego por la roca mojada del deshielo.

Una vez en el Veleta me he encontrado con varios esquiadores de travesía y, tras la foto que uno de ellos amablemente me ha echado, a bajar que toca de vuelta a Güejar Sierra. En este caso a través del Barranco de San Juan, tomando, más o menos a la mitad del mismo, un desvío hacia Haza Mesa y bajando por La Hortichuela hasta la vereda de La Estrella.

Ruta potente que atraviesa algunas de las partes más salvajes y menos conocidas del corazón de Sierra Nevada.